Quito. 29 jun 2000. Los gatos son realmente unos animales
fantásticos: ¡tienen 40 huesos más que el ser humano!, por eso son
tan ágiles y flexibles. Pueden recorrer cinco veces la longitud de
su cuerpo de un solo salto. Esto equivaldría a que un hombre, de
un solo brinco, saltara el ancho de una piscina.

La vista, el oído y el tacto, son los sentidos que más
desarrollados tiene. Sus ojos funcionan con la misma eficacia
tanto en el día como en la noche, porque están provistos de una
gran cantidad de células receptoras de luz. La visión nocturna de
este felino es cinco veces mejor que la humana.

En cuanto al oído, los gatos poseen veinte músculos en cada oreja,
lo que les permite moverlas independientemente a fin de localizar
sonidos con total precisión. Son capaces de escuchar la corriente
que viaja por los cables de los electrodomésticos, incluso cuando
estos están apagados. Con semejante oído, alegremonos de que los
gatos no sean chismosos.

Otro formidable sentido que poseen es el tacto. Las sensibles
almohadillas de sus patas registran cualquier vibración: pueden
percibir un terremoto con días de anticipación. ¿Qué te parece?,
tienes un sismógrafo propio en casa.

Consentidos y mimados

A los gatos les encanta que los acariciemos, son muy mimosos.
Nuestras manos les recuerdan los lamidos de su madre. De hecho, su
lengua es como un peine, que tiene una especie de púas dirigidas
hacia atrás, que producen una secreción que hace que su piel se
mantenga limpia, brillosa e impermeable.

Pero lo que más les encanta es dormir: dos tercios de su vida se
la pasan acostados y roncando, ¡gatos perezosos!

Y aunque no lo creas, estos felinos son muy exigentes, odian los
alimentos fríos, más aún si están helados. Tampoco les gustan muy
calientes, prefieren el término medio, a una temperatura de 40°C.

Cuidados y atenciones

Los gatitos recién nacidos necesitan del cuidado de su madre. No
solo por el afecto, sino porque no son capaces de controlar su
calor corporal. Sin el abrigo de mamá gata morirían en menos de
una hora.

Además, la leche materna también es indispensable. Son muy
tragones, en tan solo cinco días de nacidos duplican su peso.

Sin embargo, estas no son todas las atenciones que requiere el
tierno minino. A los dos meses tienes que llevarlo donde un
veterinario, para la respectiva vacunación. La primera dosis
deberá repetirse tres semanas más tarde; después bastará con una
sola aplicación cada año.

Récords gatunos

El más pesado

Fue un macho australiano llamado Himmy. Llegó a pesar 47 libras.
¡Imagínate!, el peso de casi medio quintal. ¡Qué gato más comelón!

El más pequeño

Se llama Tinker Toy, y vive en el Himalaya. Mide solo 7 cm. de
alto y 19 cm. de largo. El tamaño promedio de un gato doméstico es
de 19 cm. de alto y 75 cm. de largo. ¡Qué pequeño eres, Tinker
Toy!

El más viejo

El gato que más vivió se llamó Puss. Fue un inglés que alcanzó la
increíble edad de 36 años. Generalmente los gatos viven entre 8 y
12 años.

El campeón caza ratones

Fue nada menos y nada más que una gata escocesa llamada Towser.
Vivió 24 años y cazó un estimado de 28.900 ratones. ¡Un promedio
de 3 ratones diarios! Sin duda Towser era una felina muy
malgeniada.

Los cuidados para un lindo perrito

Cuando los perritos nacen son tan débiles que no podrían
sobrevivir sin el cuidado y el abrigo de su madre, durante el
primer mes y medio de vida. Pasado este tiempo, se pueden separar
de ella y empezar la gran aventura de conocer el mundo por su
cuenta.

Para que un perrito pueda llevar una vida saludable es necesario
vacunarlo. Las inyecciones librarán a la mascota de enfermedades
mortales como la parvovirosis, leptospirosis, hepatitis, rabia y
moquillo. Un can bien cuidado tranquilamente llega hasta los 15
años.

Las vacunas deben ser administradas de acuerdo con las
indicaciones del doctor y en el tiempo que él determine. Si tú
dejas pasar los días o no completas el tratamiento, el perrito aún
será susceptible de contagiarse con esas terribles enfermedades,
muchas veces mortales.

Un buen potaje

Para el comelón de tu perrito es buenazo que le des comida todas
las veces que quieras, pero es mejor para ti y para él establecer
un horario de lunch. Si tiene menos de un año, los veterinarios
recomiendan alimentarlos tres veces al día (desayuno, almuerzo y
merienda). De lo contrario, una sola vez al día es suficiente, tú
escoges a qué hora.

Los animales, al igual que las personas, necesitan de una
alimentación que contenga todas las vitaminas, proteínas y
minerales. En el caso de los perritos, es mejor el balanceado, es
decir toda la comida preparada que encuentras en el mercado.

La comida casera no es mala, pero no le da todo lo que necesita y
luego puede presentar problemas en algunos órganos como riñones,
hígado, etc. A veces pensamos que con coladas cubrimos todas sus
necesidades, pero solo estamos saciando su hambre y engordándolo,
no alimentándolo.

En caso de que tu perrito esté comiendo tierra o las heces fecales
de otros animales es porque su organismo le reclama minerales y
vitaminas. Para solucionar el problema consulta con el
veterinario.

La Limpieza

Nunca cometas el error de bañar a tu perrito antes de los 45 días
de nacido. Estarías atentando contra su vida. Pasado ese plazo,
puedes hacerlo con una frecuencia de una vez al mes.

No es bueno bañarlos seguido (cada 15 días o todas las semanas)
porque la piel del perrito pierde el aceite natural y empieza a
producir escamas. Si el perro es peludísimo se pueden utilizar los
baños en seco que ayudan a que permanezcan limpios, cada 8 días.

En el baño es bueno utilizar un shampoo medicado para ellos, ya
que el fabricado para cabello humano le daña el pelito. Utiliza
agua tibia.

A tu perrito jamás debes pegarle o reprenderlo, porque se hará muy
tímido o bravo. Al igual que a un niño, se lo debe educar con
paciencia.

Quiero dormir con mi perrito

No hay ningún problema, si es que se acomoda a los pies o en el
piso. No es bueno que duerman en la cabecera, puesto que comparten
el mismo aire.

Récords perrunos

El más pequeño

El perro más pequeñito del mundo, fue un terrier yorkshire que
medía lo mismo que una caja de chiclets, 9,5 cm de largo por 6.3
cm de alto, y pesaba apenas 113 gramos.

El más viejo

Un pastor australiano llamado Bluey, fue el perro que vivió más
tiempo, llegó a cumplir 29 años 5 meses.

¡Qué buen olfato!

En una ocasión, un perro detective logró rastrear a un ladrón a
160 km de distancia. (Texto tomado de La Revista Cometa 279)
EXPLORED
en Ciudad Quito

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