Temporal en sudamérica
Río de Janeiro. Un total de 23 ciudades brasileñas han declarado el estado de emergencia tras el fuerte temporal del pasado sábado que dejó 12 muertos y 36 500 damnificados en Río Grande do Sul, un estado ubicado en el sur del Brasil, informó ayer la Defensa Civil.
Otras 27 ciudades se declararon en estado de atención y pueden decretar la emergencia en cualquier momento debido a las pérdidas provocadas por las lluvias, que dejaron miles de casas sin tejado, cultivos totalmente destruidos, bloqueos en varias carreteras y unas 73 mil viviendas sin energía eléctrica.
Los temporales, con vientos de hasta 80 km por hora, se prolongaron desde la noche del pasado viernes hasta la mañana del sábado y afectaron, con deslizamientos de tierras, inundaciones y caídas de los postes del tendido eléctrico, diferentes regiones de Río Grande do Sul.
El hecho más grave se registró en Igrejinha, municipio en el interior de Río Grande do Sul, en donde un deslizamiento de tierras sepultó seis viviendas y provocó la muerte de siete personas.
Entre las víctimas figuran toda una familia: los padres y sus tres hijos, de 9, 19 y 22 años, que quedaron sepultados bajo su vivienda. Otro deslizamiento en un barrio de la ciudad de Nova Hamburgo sepultó una vivienda en la que estaban tres hermanos, de 9, 11 y 13 años.
El derrumbe de un galpón provocó además la muerte de un agricultor que intentaba salvar sus herramientas de trabajo de una inundación. En Sapucaia do Sul, una persona murió electrocutada.
Según el Instituto Nacional de Meteorología (Inmet), pese a que ya no llueve en ningún municipio, las condiciones meteorológicas aún son propicias para nuevas lluvias y ventarrones.
En Venezuela, el temporal de lluvias causó la muerte de 10 personas, miembros de una misma familia, el pasado sábado en el estado venezolano de Yaracuy (noroeste) al desbordarse una quebrada.
"La crecida arrastró a cinco menores y cinco adultos, que lamentablemente fallecieron. Mientras diez personas, de la misma familia, lograron sobrevivir", informó el gobernador de Yaracuy, Julio León.
El responsable dijo que la crecida de la quebrada Guarincón, situada en un sector rural del estado, se produjo de forma repentina debido a una fuerte precipitación en la cabecera de la quebrada y sorprendió a la familia, que se encontraba disfrutando por el feriado de Semana Santa.
Varios ríos, represas y quebradas se han desbordado en toda la zona norte de Venezuela en los últimos días, provocando cortes de carreteras y problemas de movilización durante el feriado. Las lluvias, que también han dejado cientos de casas anegadas en diversos poblados, seguirán afectando al país por al menos un par de días más, según informes meteorológicos. (EFE-AFP)
Difícil retorno de colombianos
Los colombianos retornaron ayer a sus hogares tras el prolongado feriado de Semana Santa, en medio de difíciles condiciones por las fuertes lluvias que mantienen cortadas 16 carreteras en el país.
En lo que va de abril, las lluvias han provocado la muerte de 67 personas, la desaparición de 8 y 98 516 damnificados, aunque este fin de semana no se registraron víctimas. (AFP)
Río de Janeiro. Un total de 23 ciudades brasileñas han declarado el estado de emergencia tras el fuerte temporal del pasado sábado que dejó 12 muertos y 36 500 damnificados en Río Grande do Sul, un estado ubicado en el sur del Brasil, informó ayer la Defensa Civil.Otras 27 ciudades se declararon en estado de atención y pueden decretar la emergencia en cualquier momento debido a las pérdidas provocadas por las lluvias, que dejaron miles de casas sin tejado, cultivos totalmente destruidos, bloqueos en varias carreteras y unas 73 mil viviendas sin energía eléctrica.
Los temporales, con vientos de hasta 80 km por hora, se prolongaron desde la noche del pasado viernes hasta la mañana del sábado y afectaron, con deslizamientos de tierras, inundaciones y caídas de los postes del tendido eléctrico, diferentes regiones de Río Grande do Sul.
El hecho más grave se registró en Igrejinha, municipio en el interior de Río Grande do Sul, en donde un deslizamiento de tierras sepultó seis viviendas y provocó la muerte de siete personas.
Entre las víctimas figuran toda una familia: los padres y sus tres hijos, de 9, 19 y 22 años, que quedaron sepultados bajo su vivienda. Otro deslizamiento en un barrio de la ciudad de Nova Hamburgo sepultó una vivienda en la que estaban tres hermanos, de 9, 11 y 13 años.
El derrumbe de un galpón provocó además la muerte de un agricultor que intentaba salvar sus herramientas de trabajo de una inundación. En Sapucaia do Sul, una persona murió electrocutada.
Según el Instituto Nacional de Meteorología (Inmet), pese a que ya no llueve en ningún municipio, las condiciones meteorológicas aún son propicias para nuevas lluvias y ventarrones.
En Venezuela, el temporal de lluvias causó la muerte de 10 personas, miembros de una misma familia, el pasado sábado en el estado venezolano de Yaracuy (noroeste) al desbordarse una quebrada.
"La crecida arrastró a cinco menores y cinco adultos, que lamentablemente fallecieron. Mientras diez personas, de la misma familia, lograron sobrevivir", informó el gobernador de Yaracuy, Julio León.
El responsable dijo que la crecida de la quebrada Guarincón, situada en un sector rural del estado, se produjo de forma repentina debido a una fuerte precipitación en la cabecera de la quebrada y sorprendió a la familia, que se encontraba disfrutando por el feriado de Semana Santa.
Varios ríos, represas y quebradas se han desbordado en toda la zona norte de Venezuela en los últimos días, provocando cortes de carreteras y problemas de movilización durante el feriado. Las lluvias, que también han dejado cientos de casas anegadas en diversos poblados, seguirán afectando al país por al menos un par de días más, según informes meteorológicos. (EFE-AFP)
Difícil retorno de colombianos
Los colombianos retornaron ayer a sus hogares tras el prolongado feriado de Semana Santa, en medio de difíciles condiciones por las fuertes lluvias que mantienen cortadas 16 carreteras en el país.
En lo que va de abril, las lluvias han provocado la muerte de 67 personas, la desaparición de 8 y 98 516 damnificados, aunque este fin de semana no se registraron víctimas. (AFP)
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