Quito. 19 nov 2000. Iberoamérica volvió a encontrarse este año, ahora en
Panamá, tras nueve cumbres en las que ha agitado la bandera de la unidad
y la salvación de la región, para discutir el tema de la niñez, principal
víctima del cáncer de la pobreza y la violencia, que sus dirigentes no
han sabido frenar.
Los dignatarios de América Latina, España y Portugal cumplieron en Panamá
su décima Cumbre, desde la que mantuvieron en 1991 en Guadalajara.
Su novena y polémica versión, el año pasado en La Habana, se celebró bajo
un complicado panorama de diferendos intrarregionales y fuertes reclamos
por la democratización de Cuba.
Diferencias bilaterales provocaron en el cónclave de La Habana cinco
ausencias sensibles: Chile y Argentina, en protesta por la pretensión
española de estirar el brazo de la ley para juzgar a Augusto Pinochet; y
Nicaragua, El Salvador y Costa Rica por discrepancias políticas con Fidel
Castro.
No obstante, varios gobiernos desean preservar las Cumbres
Iberoamericanas como el máximo mecanismo de concertación política que
tiene la región y el primero casi 200 años después del sueño de Simón
Bolívar de unir al subcontinente, además de ser el primero en tender
puentes hacia la península ibérica.
Uno de los logros concretos en estos diez años de la Cumbre es la
Secretaría Permanente de Cooperación, con sede en Madrid, que impulsa
iniciativas de desarrollo socio-económico.
Pero los problemas de Latinoamérica son enormes:
El 35% de la población de América Latina y el Caribe -unos 177 millones
de personas- viven en la pobreza, con ingresos equivalentes a menos de $2
diarios, y la quinta parte de los 502 millones de habitantes recibe
apenas el 4,5% del ingreso total, según un informe del Banco Mundial,
divulgado en septiembre último.
En Latinoamérica, la violencia "es cinco veces más alta que en el resto
del mundo" y a consecuencia de ella se gastan $2 000 millones en atención
médica, se dijo en XII Conferencia Iberoamericana de Ministros de
Justicia, celebrada en La Habana, en octubre pasado.
A la par, la región sigue arrastrando la pesada deuda externa, como uno
de los factores que frenan gravemente su desarrollo.
Entre 1989 y 1997, Latinoamérica destinó al pago de su deuda más del 32%
de sus ingresos captados por exportación de bienes y servicios. No
obstante esos volúmenes, la deuda latinoamericana ha aumentado en $300
000 millones en los últimos diez años, de acuerdo a fuentes cubanas.
(AFP)
Aznar: "hay que aceptar la globalización"
El presidente del Gobierno español, José María Aznar, advirtió sobre los
riesgos de apartarse de la institucionalidad y llamó a aceptar la
globalización, a la que consideró tan inevitable como la ley de la
gravedad.
"La comunidad iberoamericana tiene que prestar, y hoy especialmente, una
muy singular atención al fortalecimiento de la institucionalidad
democrática", dijo Aznar, en referencia a crisis que en los últimos
tiempos amenazó la continuidad democrática en países como Perú, Ecuador o
Paraguay.
"No hay alternativa a la democracia representativa. Salirse del camino de
la democracia es el camino que lleva a la pobreza y la tiranía", añadió
el mandatario. La otra clave, subrayó, es la de una economía de marcado.
Presentó como ejemplo la evolución de España, que "hace 20 años era un
país de emigrantes, de recepción de ayuda al desarrollo" y que hoy se ha
convertido, gracias a los procesos de privatización y de integración en
la UE, en el quinto productor mundial de autos, aunque ninguna de las
fábricas sea española.
Recordó asimismo la gran afluencia de capitales españoles en América
Latina, y se comprometió a "trabajar para que Europa se abra cadavez más
a Iberoamérica". (AFP)
Fidel Castro denuncio un supuesto complot
El presidente Fidel Castro denunció que el exilio cubano en Miami envió
un comando para asesinarlo en Panamá.
"Han mandado gente con el propósito de eliminarme físicamente. Ya se
encuentran en esta ciudad y han introducido armas y explosivos", expresó
Castro.
Castro acusó a la Fundación Cubano-americana de estar detrás de un
intento para asesinarlo.
Las autoridades panameñas detuvieron a cuatro cubanos como parte de la
investigación en torno al supuesto complot, informó Carlos Barés, el
director de la Policía Nacional.
Castro habló en la inauguración de la Cumbre y afirmó que su país es un
ejemplo de que con pocos recursos se pueden atender las necesidades de la
niñez.
En América Latina, según dijo Castro, "la realidad de los niños es
evidentemente dramática". Destacó que la tasa de mortalidad de menores de
cinco años en 1998 fue de 39% por cada mil nacidos vivos en Latinoamérica
y el Caribe. Es decir, medio millón fallece cada año por enfermedades que
pueden evitarse, afirmó Castro.
Mencionó el hecho de cómo Cuba, "aislada y sometida", por el embargo de
EEUU, ha alcanzado logros en el campo infantil, como tener una tasa de
mortalidad infantil anual de 6,4% por cada mil nacidos vivos en un año.
(AP)
Latinoamérica tiene 40 millones de niños en la calle
En el mundo hay unos 100 millones de niños que viven en la calle a tiempo
parcial (niños en la calle) o completo (niños de la calle): 40 millones
en América Latina, de 25 a 30 millones en Asia y 10 millones en Africa,
según estimaciones de organismos internacionales.
Los niños en la calle -que mendigan, venden baratijas, son lustrabotas o
limpian autos, pero que viven con sus familias- representarían alrededor
del 75% de menores en dificultad.
El 25% restante vive en la calle, según informes recientes de la filial
suiza de Casa Alianza, una entidad con sede en Nueva York, muy presente
en programas de ayuda a la infancia en México y América Central.
Casa Alianza subraya que "el fenómeno de los niños de la calle se
incrementa a medida que aumenta la población del Tercer Mundo".
Las causas de esas situaciones trágicas son numerosas; entre las más
citadas, aparecen la desigual distribución de riquezas, el rápido proceso
de urbanización, el incremento de la violencia familiar, las guerras, las
catástrofes naturales.
Casa Alianza ofrece todo un programa de reinserción, que va de los
albergues gratuitos a la formación profesional y la asesoría legal.
Al referirse a la Cumbre de Panamá, el director regional de Casa Alianza
en América Central, Bruce Harris, expresó su deseo de que "no sea sólo
retórica". (AFP)(Diario Hoy)
Panamá, tras nueve cumbres en las que ha agitado la bandera de la unidad
y la salvación de la región, para discutir el tema de la niñez, principal
víctima del cáncer de la pobreza y la violencia, que sus dirigentes no
han sabido frenar.
Los dignatarios de América Latina, España y Portugal cumplieron en Panamá
su décima Cumbre, desde la que mantuvieron en 1991 en Guadalajara.
Su novena y polémica versión, el año pasado en La Habana, se celebró bajo
un complicado panorama de diferendos intrarregionales y fuertes reclamos
por la democratización de Cuba.
Diferencias bilaterales provocaron en el cónclave de La Habana cinco
ausencias sensibles: Chile y Argentina, en protesta por la pretensión
española de estirar el brazo de la ley para juzgar a Augusto Pinochet; y
Nicaragua, El Salvador y Costa Rica por discrepancias políticas con Fidel
Castro.
No obstante, varios gobiernos desean preservar las Cumbres
Iberoamericanas como el máximo mecanismo de concertación política que
tiene la región y el primero casi 200 años después del sueño de Simón
Bolívar de unir al subcontinente, además de ser el primero en tender
puentes hacia la península ibérica.
Uno de los logros concretos en estos diez años de la Cumbre es la
Secretaría Permanente de Cooperación, con sede en Madrid, que impulsa
iniciativas de desarrollo socio-económico.
Pero los problemas de Latinoamérica son enormes:
El 35% de la población de América Latina y el Caribe -unos 177 millones
de personas- viven en la pobreza, con ingresos equivalentes a menos de $2
diarios, y la quinta parte de los 502 millones de habitantes recibe
apenas el 4,5% del ingreso total, según un informe del Banco Mundial,
divulgado en septiembre último.
En Latinoamérica, la violencia "es cinco veces más alta que en el resto
del mundo" y a consecuencia de ella se gastan $2 000 millones en atención
médica, se dijo en XII Conferencia Iberoamericana de Ministros de
Justicia, celebrada en La Habana, en octubre pasado.
A la par, la región sigue arrastrando la pesada deuda externa, como uno
de los factores que frenan gravemente su desarrollo.
Entre 1989 y 1997, Latinoamérica destinó al pago de su deuda más del 32%
de sus ingresos captados por exportación de bienes y servicios. No
obstante esos volúmenes, la deuda latinoamericana ha aumentado en $300
000 millones en los últimos diez años, de acuerdo a fuentes cubanas.
(AFP)
Aznar: "hay que aceptar la globalización"
El presidente del Gobierno español, José María Aznar, advirtió sobre los
riesgos de apartarse de la institucionalidad y llamó a aceptar la
globalización, a la que consideró tan inevitable como la ley de la
gravedad.
"La comunidad iberoamericana tiene que prestar, y hoy especialmente, una
muy singular atención al fortalecimiento de la institucionalidad
democrática", dijo Aznar, en referencia a crisis que en los últimos
tiempos amenazó la continuidad democrática en países como Perú, Ecuador o
Paraguay.
"No hay alternativa a la democracia representativa. Salirse del camino de
la democracia es el camino que lleva a la pobreza y la tiranía", añadió
el mandatario. La otra clave, subrayó, es la de una economía de marcado.
Presentó como ejemplo la evolución de España, que "hace 20 años era un
país de emigrantes, de recepción de ayuda al desarrollo" y que hoy se ha
convertido, gracias a los procesos de privatización y de integración en
la UE, en el quinto productor mundial de autos, aunque ninguna de las
fábricas sea española.
Recordó asimismo la gran afluencia de capitales españoles en América
Latina, y se comprometió a "trabajar para que Europa se abra cadavez más
a Iberoamérica". (AFP)
Fidel Castro denuncio un supuesto complot
El presidente Fidel Castro denunció que el exilio cubano en Miami envió
un comando para asesinarlo en Panamá.
"Han mandado gente con el propósito de eliminarme físicamente. Ya se
encuentran en esta ciudad y han introducido armas y explosivos", expresó
Castro.
Castro acusó a la Fundación Cubano-americana de estar detrás de un
intento para asesinarlo.
Las autoridades panameñas detuvieron a cuatro cubanos como parte de la
investigación en torno al supuesto complot, informó Carlos Barés, el
director de la Policía Nacional.
Castro habló en la inauguración de la Cumbre y afirmó que su país es un
ejemplo de que con pocos recursos se pueden atender las necesidades de la
niñez.
En América Latina, según dijo Castro, "la realidad de los niños es
evidentemente dramática". Destacó que la tasa de mortalidad de menores de
cinco años en 1998 fue de 39% por cada mil nacidos vivos en Latinoamérica
y el Caribe. Es decir, medio millón fallece cada año por enfermedades que
pueden evitarse, afirmó Castro.
Mencionó el hecho de cómo Cuba, "aislada y sometida", por el embargo de
EEUU, ha alcanzado logros en el campo infantil, como tener una tasa de
mortalidad infantil anual de 6,4% por cada mil nacidos vivos en un año.
(AP)
Latinoamérica tiene 40 millones de niños en la calle
En el mundo hay unos 100 millones de niños que viven en la calle a tiempo
parcial (niños en la calle) o completo (niños de la calle): 40 millones
en América Latina, de 25 a 30 millones en Asia y 10 millones en Africa,
según estimaciones de organismos internacionales.
Los niños en la calle -que mendigan, venden baratijas, son lustrabotas o
limpian autos, pero que viven con sus familias- representarían alrededor
del 75% de menores en dificultad.
El 25% restante vive en la calle, según informes recientes de la filial
suiza de Casa Alianza, una entidad con sede en Nueva York, muy presente
en programas de ayuda a la infancia en México y América Central.
Casa Alianza subraya que "el fenómeno de los niños de la calle se
incrementa a medida que aumenta la población del Tercer Mundo".
Las causas de esas situaciones trágicas son numerosas; entre las más
citadas, aparecen la desigual distribución de riquezas, el rápido proceso
de urbanización, el incremento de la violencia familiar, las guerras, las
catástrofes naturales.
Casa Alianza ofrece todo un programa de reinserción, que va de los
albergues gratuitos a la formación profesional y la asesoría legal.
Al referirse a la Cumbre de Panamá, el director regional de Casa Alianza
en América Central, Bruce Harris, expresó su deseo de que "no sea sólo
retórica". (AFP)(Diario Hoy)
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