Una crónica de cómo salió de España el ex banquero extraditado el viernes
Por Orlando Pérez
Quito. 11 mar 2001. En menos de ocho horas se resolvió todo. A las 15:00
del pasado jueves se reunió el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, más
conocido como La Corte de Estrasburgo.
A las 23:30, el general ecuatoriano Paco Urrutia recibía en el avión de
Lan Chile al ex banquero Alejandro Peñafiel, quien llevaba dos bolsas de
viaje, una grande y una pequeña, con varias pertenencias de uso personal.
Su cara, según el vídeo grabado en España, era de absoluta resignación.
Colaboró con todo y con la firma del acta de entrega recepción, en el
mismo avión de Lan Chile, el ex banquero advirtió, en ese instante, el
futuro que le esperaba.
El equipo de abogados y colaboradores de Peñafiel, desplegado en Madrid,
Estrasburgo y Quito no tuvo tiempo siquiera de reunirse, comunicarse o
tomar una decisión porque la decisión era inapelable.
Apenas la Corte de Estrasburgo notificó a España de que no había motivo
para retener a Peñafiel en Madrid, los diplomáticos ecuatorianos ya lo
sabían.
El movimiento diplomático de la embajada en Madrid, más los contactos en
Estrasburgo del embajador Francisco Carrión, permitió que todo saliera en
el tiempo y las condiciones requeridas. Paco Urrutía con dos policías
llegó ese mismo jueves y junto con los diplomáticos definieron el
operativo.
Lo fundamental era despistar a todo mundo sobre la ruta. Ni un solo dato
salió de Urrutia ni Carrión. Se hicieron varias reservaciones para vuelos
que llegarían a Quito haciendo escala en Miami, Caracas o Santiago de
Chile.
Se escogió la última opción porque calzó con la hora en que Peñafiel
salió de la cárcel de Valdemoro, en las afueras de Madrid.
Para ello hizo falta que el ministerio del Interior comunicara a la
Policía, esta al jefe de la Audiencia Nacional, Eduardo Funjainiño, quien
al final notificó al director de la cárcel y éste procedió a la entrega
de Peñafiel a los agentes de la Interpol española.
Alrededor de las 22:00, hora de España, una llamada a EEUU, al canciller
Heinz Moeller, notificó que el operativo para la extradicción de Peñafiel
empezaba y que el viernes se tendría al ex banquero en Quito. A la
cancillería ecuatoriana solo se le notificó cuando a las 23:50 decoló la
nave de Lan Chile con destino a Santiago. Para eso también estaba
informada la embajada ecuatoriana en Chile de modo que garantice la
compra de boletos y reservación en el vuelo directo del viernes hacia
Ecuador. Cuando aterrizó el avión en Quito, Carrión se dijo: un problema
menos.
Ex banquero estará en el Pabellón A del ex Penal
Varios canales de televisión y medios de comunicación impresa se
apostaron desde la mañana de ayer en las afueras del ex penal García
Moreno, al centro de Quito, en donde se encuentra recluido desde el
último viernes el ex banquero Alejandro Peñafiel, acusado de delitos de
defraudación en dos Juzgados de lo Penal de Pichincha. Según dijo uno de
sus abogados, Marcelo Ron Torres, su cliente no pedirá su traslado a la
Cárcel Nº 4, que está al norte de la capital, en donde estuvo recluido
los primeros meses el también ex banquero Fernando Aspiazu, antes de ser
trasladado al ex penal.
"Está muy bien, bastante animado. Lo hemos visitado algunos amigos y
lógicamente sus familiares", dijo Marcelo Ron al salir del centro de
rehabilitación, cerca de las 13:00.
Los primeros en llegar a la cárcel fueron su actual esposa, la española
Alicia Díaz; la hermana y el hijo del ex banquero entraron evadiendo las
cámaras, los micrófonos y las grabadoras. Llegaron luego de que se
formara un barullo, debido a que a las 08:00 fue encontrado un interno
muerto, al parecer producto de una sobredosis.
"Lo único que pedimos a las autoridades del Gobierno son las suficientes
garantías de seguridad", dijo el abogado, mientras caminaba a su carro,
acompañado de otro abogado español que llegó con Alejandro Peñafiel, el
viernes.
A las 12:45 llegó Elisio Moscoso, alto oficial de la Policía, al parecer,
para cerciorarse de la seguridad que existe en el Pabellón A, en donde
ahora están recluidos dos ex banqueros: Peñafiel y Fernando Aspiazu. La
seguridad en ese Pabellón que fue reforzada con más efectivos, a cargo
del Grupo de Operaciones Especiales.
La Policía negó que Peñafiel esté ocupando la celda que fue usada por
Jorge Hugo Reyes Torres, presunto narcotraficante que obtuvo su libertad
hace pocas semanas. Está en el terser piso del Pabellón A.
Alejandro Peñafiel llegó a Quito a las 17:35 del viernes anterior, en el
vuelo de la aerolínea Lanchile, a bordo del Airbus A-320. El ex banquero
fue escoltado a la sala VIP del aeropuerto por dos representantes del
Gobierno español y luego fue conducido a la cárcel en medio de una
caravana de cuatro vehículos blindados de la Policía.
Peñafiel está a órdenes del juez Decimocuarto de lo Penal, quien dictó
auto de llamamiento a plenario el 31 de enero de 2001, para que el ex
banquero responda por los delitos financieros que se le imputan por la
liquidación forzosa del Banco de Préstamos, el 24 de agosto de 1998.
Las visitas al ex banquero fueron restringidas para la prensa, por el
momento. Su abogado aseguró que hablará en las próximas horas o días y
que su ánimo no ha decaído.
Solo seis personas tuvieron autorización para visitarlo ayer, entre ellos
su abogados que aseguraron respetarán todos los procedimientos legales,
para intentar demostrar la inocencia de su defendido. Peñafiel debe
afrontar tres juicios que se encuentran en el Juzgado Séptimo y en el
Decimocuarto de Penal de Pichincha. La familia del ex banquero dijo estar
tranquila.
Mientras en la puerta del ex penal se seguía aglomerando la gente para
ingresar en el segundo turno de visitas, que comienza a las 13:00 y
termina a las 16:00. (JT)
Un comité para vigilar y reforzar los juicios
- La presencia en nuestro país del ex-titular del Banco de Préstamos,
Alejandro Peñafiel, no garantiza la devolución inmediata del dinero que
aún se les adeuda a los acreedores de esa institución. "Esto solo se
concretará cuando la Agencia de Garantía de Depósitos (AGD) tenga la
suficiente voluntad política para hacerlo".
- Ese es el criterio del abogado defensor de los clientes del Banco de
Préstamos, Fernando Larrea, quien asegura que, si bien la extradición de
Peñafiel es importante, para su guzgamiento y castigo, esto no soluciona
el problema de la devolución del dinero de los acreedores.
- Para Larrea, la extradición de Peñafiel es un logro para el Ecuador y
"un éxito de la verdadera diplomacia, ya que es al embajador ecuatoriano
en España, Fransisco Carrión y no al canciller Moeller, a quien los
acreedores deben agradecer que este proceso haya concluido", señaló.
- Fernando Chamba, uno de los perjudicados del banco, afirmó que ahora se
espera que la justicia cumpla con la obligación de castigar a Peñafiel.
- Se conformará un comité de abogados "para reforzar los juicios contra
este delincuente de cuello blanco y bloquear al equipo de defensores que
contratará", señaló.
- Informó que para coordinar acciones judiciales, los acreedores del
banco se reunirán en asamblea, el próximo martes en la casa matriz del
banco en Quito. (PACH) (Diario Hoy)
Por Orlando Pérez
Quito. 11 mar 2001. En menos de ocho horas se resolvió todo. A las 15:00
del pasado jueves se reunió el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, más
conocido como La Corte de Estrasburgo.
A las 23:30, el general ecuatoriano Paco Urrutia recibía en el avión de
Lan Chile al ex banquero Alejandro Peñafiel, quien llevaba dos bolsas de
viaje, una grande y una pequeña, con varias pertenencias de uso personal.
Su cara, según el vídeo grabado en España, era de absoluta resignación.
Colaboró con todo y con la firma del acta de entrega recepción, en el
mismo avión de Lan Chile, el ex banquero advirtió, en ese instante, el
futuro que le esperaba.
El equipo de abogados y colaboradores de Peñafiel, desplegado en Madrid,
Estrasburgo y Quito no tuvo tiempo siquiera de reunirse, comunicarse o
tomar una decisión porque la decisión era inapelable.
Apenas la Corte de Estrasburgo notificó a España de que no había motivo
para retener a Peñafiel en Madrid, los diplomáticos ecuatorianos ya lo
sabían.
El movimiento diplomático de la embajada en Madrid, más los contactos en
Estrasburgo del embajador Francisco Carrión, permitió que todo saliera en
el tiempo y las condiciones requeridas. Paco Urrutía con dos policías
llegó ese mismo jueves y junto con los diplomáticos definieron el
operativo.
Lo fundamental era despistar a todo mundo sobre la ruta. Ni un solo dato
salió de Urrutia ni Carrión. Se hicieron varias reservaciones para vuelos
que llegarían a Quito haciendo escala en Miami, Caracas o Santiago de
Chile.
Se escogió la última opción porque calzó con la hora en que Peñafiel
salió de la cárcel de Valdemoro, en las afueras de Madrid.
Para ello hizo falta que el ministerio del Interior comunicara a la
Policía, esta al jefe de la Audiencia Nacional, Eduardo Funjainiño, quien
al final notificó al director de la cárcel y éste procedió a la entrega
de Peñafiel a los agentes de la Interpol española.
Alrededor de las 22:00, hora de España, una llamada a EEUU, al canciller
Heinz Moeller, notificó que el operativo para la extradicción de Peñafiel
empezaba y que el viernes se tendría al ex banquero en Quito. A la
cancillería ecuatoriana solo se le notificó cuando a las 23:50 decoló la
nave de Lan Chile con destino a Santiago. Para eso también estaba
informada la embajada ecuatoriana en Chile de modo que garantice la
compra de boletos y reservación en el vuelo directo del viernes hacia
Ecuador. Cuando aterrizó el avión en Quito, Carrión se dijo: un problema
menos.
Ex banquero estará en el Pabellón A del ex Penal
Varios canales de televisión y medios de comunicación impresa se
apostaron desde la mañana de ayer en las afueras del ex penal García
Moreno, al centro de Quito, en donde se encuentra recluido desde el
último viernes el ex banquero Alejandro Peñafiel, acusado de delitos de
defraudación en dos Juzgados de lo Penal de Pichincha. Según dijo uno de
sus abogados, Marcelo Ron Torres, su cliente no pedirá su traslado a la
Cárcel Nº 4, que está al norte de la capital, en donde estuvo recluido
los primeros meses el también ex banquero Fernando Aspiazu, antes de ser
trasladado al ex penal.
"Está muy bien, bastante animado. Lo hemos visitado algunos amigos y
lógicamente sus familiares", dijo Marcelo Ron al salir del centro de
rehabilitación, cerca de las 13:00.
Los primeros en llegar a la cárcel fueron su actual esposa, la española
Alicia Díaz; la hermana y el hijo del ex banquero entraron evadiendo las
cámaras, los micrófonos y las grabadoras. Llegaron luego de que se
formara un barullo, debido a que a las 08:00 fue encontrado un interno
muerto, al parecer producto de una sobredosis.
"Lo único que pedimos a las autoridades del Gobierno son las suficientes
garantías de seguridad", dijo el abogado, mientras caminaba a su carro,
acompañado de otro abogado español que llegó con Alejandro Peñafiel, el
viernes.
A las 12:45 llegó Elisio Moscoso, alto oficial de la Policía, al parecer,
para cerciorarse de la seguridad que existe en el Pabellón A, en donde
ahora están recluidos dos ex banqueros: Peñafiel y Fernando Aspiazu. La
seguridad en ese Pabellón que fue reforzada con más efectivos, a cargo
del Grupo de Operaciones Especiales.
La Policía negó que Peñafiel esté ocupando la celda que fue usada por
Jorge Hugo Reyes Torres, presunto narcotraficante que obtuvo su libertad
hace pocas semanas. Está en el terser piso del Pabellón A.
Alejandro Peñafiel llegó a Quito a las 17:35 del viernes anterior, en el
vuelo de la aerolínea Lanchile, a bordo del Airbus A-320. El ex banquero
fue escoltado a la sala VIP del aeropuerto por dos representantes del
Gobierno español y luego fue conducido a la cárcel en medio de una
caravana de cuatro vehículos blindados de la Policía.
Peñafiel está a órdenes del juez Decimocuarto de lo Penal, quien dictó
auto de llamamiento a plenario el 31 de enero de 2001, para que el ex
banquero responda por los delitos financieros que se le imputan por la
liquidación forzosa del Banco de Préstamos, el 24 de agosto de 1998.
Las visitas al ex banquero fueron restringidas para la prensa, por el
momento. Su abogado aseguró que hablará en las próximas horas o días y
que su ánimo no ha decaído.
Solo seis personas tuvieron autorización para visitarlo ayer, entre ellos
su abogados que aseguraron respetarán todos los procedimientos legales,
para intentar demostrar la inocencia de su defendido. Peñafiel debe
afrontar tres juicios que se encuentran en el Juzgado Séptimo y en el
Decimocuarto de Penal de Pichincha. La familia del ex banquero dijo estar
tranquila.
Mientras en la puerta del ex penal se seguía aglomerando la gente para
ingresar en el segundo turno de visitas, que comienza a las 13:00 y
termina a las 16:00. (JT)
Un comité para vigilar y reforzar los juicios
- La presencia en nuestro país del ex-titular del Banco de Préstamos,
Alejandro Peñafiel, no garantiza la devolución inmediata del dinero que
aún se les adeuda a los acreedores de esa institución. "Esto solo se
concretará cuando la Agencia de Garantía de Depósitos (AGD) tenga la
suficiente voluntad política para hacerlo".
- Ese es el criterio del abogado defensor de los clientes del Banco de
Préstamos, Fernando Larrea, quien asegura que, si bien la extradición de
Peñafiel es importante, para su guzgamiento y castigo, esto no soluciona
el problema de la devolución del dinero de los acreedores.
- Para Larrea, la extradición de Peñafiel es un logro para el Ecuador y
"un éxito de la verdadera diplomacia, ya que es al embajador ecuatoriano
en España, Fransisco Carrión y no al canciller Moeller, a quien los
acreedores deben agradecer que este proceso haya concluido", señaló.
- Fernando Chamba, uno de los perjudicados del banco, afirmó que ahora se
espera que la justicia cumpla con la obligación de castigar a Peñafiel.
- Se conformará un comité de abogados "para reforzar los juicios contra
este delincuente de cuello blanco y bloquear al equipo de defensores que
contratará", señaló.
- Informó que para coordinar acciones judiciales, los acreedores del
banco se reunirán en asamblea, el próximo martes en la casa matriz del
banco en Quito. (PACH) (Diario Hoy)
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