El Centro de Memoria Histórica presentó un informe detallado ayer

De 1970 a 2010, en ese país fueron plagiadas 39 058 personas. Entre ellas, 358 alcaldes, 75 senadores y 66 diputados. Solo de enero a mayo de este año hubo 115 casos. El 60% fue atribuido a la delincuencia común.

En las últimas cuatro décadas en Colombia, se calcula que 39 058 personas fueron secuestradas. La cifra equivale a una media de 976 casos por año.

Las cifras constan en el informe Una verdad secuestrada: cuarenta años de estadísticas de secuestro (1970-2010) que fue divulgado ayer en Bogotá.

El documento destaca que ese delito se ha propagado en 1 006 de los 1 102 municipios que forman el país.

El estudio, realizado por el Centro Nacional de Memoria Histórica y la firma independiente Cifras & Conceptos, recogió más de 1 302 337 datos.

Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) son responsables confirmados del 37% de los casos de secuestro, seguidas de cerca por el Ejército de Liberación Nacional (ELN), con el 30%; las bandas criminales (20%); otros (9%); y, paramilitares (4%).

El ministro del Interior, Fernando Carrillo, aseguró que se trata de la base de datos más importante de este crimen en Colombia porque se centra en las víctimas y tiene un enfoque que abarca lo psicosocial.

El secuestro, durante el conflicto colombiano que lleva más de medio siglo, alcanzó su punto más alto entre 1995 y 2004, cuando las guerrillas lo utilizaron para presionar a las autoridades y como método de financiación.

Los autores del documento señalan que 301 personas han sido secuestradas más de una vez y que una de ellas fue víctima de este delito en cinco ocasiones.

Al hacer una clasificación de los afectados por género, la mayoría de los secuestrados (78%) es hombre y 22% mujer.

Para los captores, la edad es lo de menos, pues entre las víctimas, 79% tenía entre 18 y 65 años en el momento del plagio, 15% era menor de edad y el 6% sobrepasaba los 65 años.

De la misma forma, 3% de los afectados por este delito era extranjero, agrega la investigación, que tuvo el apoyo del Gobierno de Juan Manuel Santos y de la Unión Europea (UE).

En 84% de los casos, el secuestro fue impulsado por aspectos económicos, mientras que en 12% la motivación fue política y en el 4% tuvo otros intereses.

Para elaborar el estudio, los investigadores recopilaron datos e informaciones en fuentes oficiales como la Policía, el antiguo Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), la Fiscalía y tribunales, el Fondo Nacional para la Defensa de la Libertad Personal (Fondelibertad), así como en informes y casos denunciados por la prensa de ese país.

A la presentación del texto asistió la excandidata a la Vicepresidencia colombiana Clara Rojas.

Ella pasó seis años en manos de las FARC junto a la entonces candidata presidencial íngrid Betancourt. Ese mediático caso corresponde al 9% de los secuestros que duraron más de un año.

En el 59% de los plagios, el tiempo que las víctimas han permanecido en cautiverio es de entre uno y 30 días. (EFE/AFP)

Las capturas: un medio ideológico

El secuestro en Colombia tomó forma en los setenta y su principal promotor fue la desaparecida guerrilla del Movimiento 19 de Abril (M-19), que lo identificó como una herramienta antioligarquía. Pero luego fue usada como medio de extorsión. Los sectores más afectados son la administración pública y defensa, con 19,3% de los secuestros, el agropecuario 19,1% y el comercio 18,9%. Además 358 alcaldes, 75 congresistas, 66 diputados y 50 personeros municipales fueron capturados.

 

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