Santa Fé de Bogotá. 22.09.93. La permisividad cultural hacia
el consumo de bebidas alcohólicas y los altos índices de
irratibilidad, sumados a la baja autoestima de los
colombianos, constituyen un explosivo coctel que conduce con
frecuencia a la violencia.
Esa perversa combinación de factores se evidenció de manera
dramática el domingo 5 y lunes 6, cuando los colombianos se
embriagaron de triunfo y licor para celebrar el triunfo de 5-0
que la selección nacional de fútbol, obtuvo frente a su par
Argentina, en Buenos Aires.
Según la más reciente encuesta del Ministerio de Salud, sobre
drogadicción, 12 de cada cien hombres y dos de cada cien
mujeres son alcohólicas. Esta es la adicción más difundida,
por encima de otros psicoactivos como marihuana, heroína,
cocaína y basuco (mezcla de cocaína con otras sustancias).
Las cifras
Aunque las cifras discrepan -así provengan de las autoridades
hospitalarias o de la Policía- el número de muertos que dejó
el carnaval, solo en la capital, sobrepasó los 50 y los
heridos fueron más de 1.000.
A la media noche del domingo, cuando el eco del quinto gol
todavía retumbaba en la memoria de los aficionados y profanos,
en la sala de urgencias del hospital de Kennedy, en el
suroccidente de la ciudad, se habían atendido "150 consultas,
67 heridos, 80 por ciento en estado de embriaguez, y siete
muertos".
La afirmación es de Antonio Ramírez, director del Hospital,
quien explicó a IPS que en ese centro se atiende 30 por ciento
de los casos de urgencia de toda la ciudad.
Los porqués
La secuela trágica de la celebración deportiva suscitó una
serie de encuestas y análisis de sociólogos que intentan
explicar porqué la violencia local también expresa a propósito
de hechos positivos.
En casi todos los casos, el licor aparece como detonante de
conflictos internos, asociados a la crisis de la violencia
social y política que signa la historia del país.
En una de las encuestas realizada en el Centro Nacional de
Consultoría (CNC), la primera semana de septiembre, resalta
que 49 por ciento de los colombianos "se irrita con facilidad"
y 23 por ciento "considera que es válido hacer justicia por
propia mano".
"Es evidente que en la celebración de un evento que estimula
un orgullo desproporcionado (el triunfo frente a Argentina)
pueda ocurrir violencia", afirmó el estudio del CNC.
Según el psiquiatra Abelardo Posada, de la división de
comportamiento humano del Ministerio de Salud, hay estudios
que indican que alrededor de 80 por ciento de los nacionales
tienen baja autoestima.
Este hecho hace que en situaciones incontroladas y asociadas
al licor se cometan actos vandalicos, añadió Posada.
Licor, maldito licor
El delirio causado por la euforia del triunfo deportivo y el
licor hizo que después del partido se repitieran miles de
escenas como las que registró una secuencia fotográfica del
diario "Nuevo Siglo".
Las fotografías captaron a un hombre ebrio cuando embestía un
automóvil en marcha, gestos festivos del transeúnte al
conductor, también borracho, el automóvil mientras pasaba por
encima del peatón, se alejaba en zig zag y dejaba atrás un
herido de muerte, que al final sobrevivió.
No son las excepcionales situaciones de carnaval, sin embargo,
las que generan altos consumos de bebidas alcohólicas y
consecuentes cifras de accidentes y violencia.
El estudio del Ministerio de Salud sobre consumo y
conocimiento de la peligrosidad de los psicoactivos revela
otros rasgos de la generalizada adicción de los colombianos al
licor.
Las bebidas embriagantes de mayor consumo son: Cerveza (30%),
aguardiente (23,2%), vino (12,6%), ron (4,8%), wisky, brandy y
champaña (4,5%), guarapo y chicha (4,5%) y vodka (0,7%).
Resalta el hecho de que la selección nacional de fútbol esta
patrocinada por la principal productora de cerveza del país.
La encuesta, efectuada a inicios de 1993, es la de mayor
cobertura sobre el tema: consultó a 24.900 personas entre 12 y
64 años de edad en 29 de los 33 departamentos del país.
Según los resultados, la franja de edad que mayor número de
alcohólicos registra, oscila entre 38 y 39 años.
Los análisis del estudio destacaron que los índices de consumo
persisten, aunque un alto porcentaje de los entrevistados
reconoció que el alcohol es dañino para la salud.
Noventa por ciento de los encuestados consideró que el alcohol
produce algún daño o grave daño, mientras que solo 10 por
ciento estimó que genera poco o ningún daño al organismo.
Las autoridades de salud consideran que para las campañas de
prevención de consumo de licor este es un buen índice, aunque
sus efectos positivos e contrarrestan con tanta promoción que
los fabricantes y distribuidores de licores hacen por medio de
los medios de comunicación.
Cortos
- Los estallidos de violencia colectiva en Colombia han
obligado a las autoridades judiciales de ese país a dictaminar
la censura para los programas de televisión.
- El Tribunal de Garantías Constitucional de Colombia decidió
que la delincuencia televisada, en su mayoría visible en
programas norteamericanos, contribuye a la violencia de la
vida real.
- Desde el 11 de mayo de 1993, el Tribunal prohibió en la
pantalla los tiroteos, las palizas, las cuchilladas, los
atentados dinamiteros y otros actos de violencia, hasta
después de las 22 horas.
- En la Nochebuena de 1992, más de 120 personas murieron y al
menos 400 resultaron lesionadas en las principales ciudades de
Colombia. Delitos, accidentes de tránsito e incendios causados
por los juegos artificiales provocaron la mayoría de las
muertes.
- La guerrilla, el narcoterrorismo, los grupos paramilitares,
el sicariato y los excesos en la lucha antisubversiva son
expresiones de la violencia en el azotado país.
- Los actos de rechazo, por los 500 años del descubrimiento de
América causaron más de 20 indígenas heridos.
- Más de un millón de colombianos han sido desplazados por la
violencia. Ecuador especialmente el nororiente, es uno de los
refugios a los que huyen.
- La violencia ha afectado incluso al ambiente deportivo: en
1989, el campeonato nacional de fútbol fue suspendido por el
asesinato de un árbitro a manos de sicarios, en Medellín.
- Pistoleros a sueldo del narcotráfico cobran hasta 4.000
dólares por el asesinato de un agente del orden.
- Siete de cada diez colombianos consideran que el gobierno
debe actuar con "mano dura" frente a la guerrilla.
- Toda esta situación de conflicto pone al ciudadano común
entre la espada y la pared. La tensión se respira en el
ambiente de las populosas ciudades del país.
La sensación de la sociedad colombiana, de estar en un pozo
sin salida, fue superada en parte por la actuación del
seleccionado de fútbol.
- Su entrenador, Francisco "Pacho" Maturana, sostuvo, desde el
inicio de su carrera en el combinado, que las alegrías
deportivas daban un respiro a la asediada psicología
colectiva.
- Y no solo eso: también le demostraría al mundo las cosas
buenas que tiene Colombia.
- Nacionalista a ultranza, Maturana y sus pupilos
representaron la "venganza" colectiva ante el escarnio mundial
por su nacionalidad;la víctima fue la selección de Argentina.
- Pero los festejos por el triunfo de su selección reflejaron
la violencia contenida, impulsada por el alcohol, puede
provocar un estallido desproporcionado... sea cual sea el
motivo. (12A)
el consumo de bebidas alcohólicas y los altos índices de
irratibilidad, sumados a la baja autoestima de los
colombianos, constituyen un explosivo coctel que conduce con
frecuencia a la violencia.
Esa perversa combinación de factores se evidenció de manera
dramática el domingo 5 y lunes 6, cuando los colombianos se
embriagaron de triunfo y licor para celebrar el triunfo de 5-0
que la selección nacional de fútbol, obtuvo frente a su par
Argentina, en Buenos Aires.
Según la más reciente encuesta del Ministerio de Salud, sobre
drogadicción, 12 de cada cien hombres y dos de cada cien
mujeres son alcohólicas. Esta es la adicción más difundida,
por encima de otros psicoactivos como marihuana, heroína,
cocaína y basuco (mezcla de cocaína con otras sustancias).
Las cifras
Aunque las cifras discrepan -así provengan de las autoridades
hospitalarias o de la Policía- el número de muertos que dejó
el carnaval, solo en la capital, sobrepasó los 50 y los
heridos fueron más de 1.000.
A la media noche del domingo, cuando el eco del quinto gol
todavía retumbaba en la memoria de los aficionados y profanos,
en la sala de urgencias del hospital de Kennedy, en el
suroccidente de la ciudad, se habían atendido "150 consultas,
67 heridos, 80 por ciento en estado de embriaguez, y siete
muertos".
La afirmación es de Antonio Ramírez, director del Hospital,
quien explicó a IPS que en ese centro se atiende 30 por ciento
de los casos de urgencia de toda la ciudad.
Los porqués
La secuela trágica de la celebración deportiva suscitó una
serie de encuestas y análisis de sociólogos que intentan
explicar porqué la violencia local también expresa a propósito
de hechos positivos.
En casi todos los casos, el licor aparece como detonante de
conflictos internos, asociados a la crisis de la violencia
social y política que signa la historia del país.
En una de las encuestas realizada en el Centro Nacional de
Consultoría (CNC), la primera semana de septiembre, resalta
que 49 por ciento de los colombianos "se irrita con facilidad"
y 23 por ciento "considera que es válido hacer justicia por
propia mano".
"Es evidente que en la celebración de un evento que estimula
un orgullo desproporcionado (el triunfo frente a Argentina)
pueda ocurrir violencia", afirmó el estudio del CNC.
Según el psiquiatra Abelardo Posada, de la división de
comportamiento humano del Ministerio de Salud, hay estudios
que indican que alrededor de 80 por ciento de los nacionales
tienen baja autoestima.
Este hecho hace que en situaciones incontroladas y asociadas
al licor se cometan actos vandalicos, añadió Posada.
Licor, maldito licor
El delirio causado por la euforia del triunfo deportivo y el
licor hizo que después del partido se repitieran miles de
escenas como las que registró una secuencia fotográfica del
diario "Nuevo Siglo".
Las fotografías captaron a un hombre ebrio cuando embestía un
automóvil en marcha, gestos festivos del transeúnte al
conductor, también borracho, el automóvil mientras pasaba por
encima del peatón, se alejaba en zig zag y dejaba atrás un
herido de muerte, que al final sobrevivió.
No son las excepcionales situaciones de carnaval, sin embargo,
las que generan altos consumos de bebidas alcohólicas y
consecuentes cifras de accidentes y violencia.
El estudio del Ministerio de Salud sobre consumo y
conocimiento de la peligrosidad de los psicoactivos revela
otros rasgos de la generalizada adicción de los colombianos al
licor.
Las bebidas embriagantes de mayor consumo son: Cerveza (30%),
aguardiente (23,2%), vino (12,6%), ron (4,8%), wisky, brandy y
champaña (4,5%), guarapo y chicha (4,5%) y vodka (0,7%).
Resalta el hecho de que la selección nacional de fútbol esta
patrocinada por la principal productora de cerveza del país.
La encuesta, efectuada a inicios de 1993, es la de mayor
cobertura sobre el tema: consultó a 24.900 personas entre 12 y
64 años de edad en 29 de los 33 departamentos del país.
Según los resultados, la franja de edad que mayor número de
alcohólicos registra, oscila entre 38 y 39 años.
Los análisis del estudio destacaron que los índices de consumo
persisten, aunque un alto porcentaje de los entrevistados
reconoció que el alcohol es dañino para la salud.
Noventa por ciento de los encuestados consideró que el alcohol
produce algún daño o grave daño, mientras que solo 10 por
ciento estimó que genera poco o ningún daño al organismo.
Las autoridades de salud consideran que para las campañas de
prevención de consumo de licor este es un buen índice, aunque
sus efectos positivos e contrarrestan con tanta promoción que
los fabricantes y distribuidores de licores hacen por medio de
los medios de comunicación.
Cortos
- Los estallidos de violencia colectiva en Colombia han
obligado a las autoridades judiciales de ese país a dictaminar
la censura para los programas de televisión.
- El Tribunal de Garantías Constitucional de Colombia decidió
que la delincuencia televisada, en su mayoría visible en
programas norteamericanos, contribuye a la violencia de la
vida real.
- Desde el 11 de mayo de 1993, el Tribunal prohibió en la
pantalla los tiroteos, las palizas, las cuchilladas, los
atentados dinamiteros y otros actos de violencia, hasta
después de las 22 horas.
- En la Nochebuena de 1992, más de 120 personas murieron y al
menos 400 resultaron lesionadas en las principales ciudades de
Colombia. Delitos, accidentes de tránsito e incendios causados
por los juegos artificiales provocaron la mayoría de las
muertes.
- La guerrilla, el narcoterrorismo, los grupos paramilitares,
el sicariato y los excesos en la lucha antisubversiva son
expresiones de la violencia en el azotado país.
- Los actos de rechazo, por los 500 años del descubrimiento de
América causaron más de 20 indígenas heridos.
- Más de un millón de colombianos han sido desplazados por la
violencia. Ecuador especialmente el nororiente, es uno de los
refugios a los que huyen.
- La violencia ha afectado incluso al ambiente deportivo: en
1989, el campeonato nacional de fútbol fue suspendido por el
asesinato de un árbitro a manos de sicarios, en Medellín.
- Pistoleros a sueldo del narcotráfico cobran hasta 4.000
dólares por el asesinato de un agente del orden.
- Siete de cada diez colombianos consideran que el gobierno
debe actuar con "mano dura" frente a la guerrilla.
- Toda esta situación de conflicto pone al ciudadano común
entre la espada y la pared. La tensión se respira en el
ambiente de las populosas ciudades del país.
La sensación de la sociedad colombiana, de estar en un pozo
sin salida, fue superada en parte por la actuación del
seleccionado de fútbol.
- Su entrenador, Francisco "Pacho" Maturana, sostuvo, desde el
inicio de su carrera en el combinado, que las alegrías
deportivas daban un respiro a la asediada psicología
colectiva.
- Y no solo eso: también le demostraría al mundo las cosas
buenas que tiene Colombia.
- Nacionalista a ultranza, Maturana y sus pupilos
representaron la "venganza" colectiva ante el escarnio mundial
por su nacionalidad;la víctima fue la selección de Argentina.
- Pero los festejos por el triunfo de su selección reflejaron
la violencia contenida, impulsada por el alcohol, puede
provocar un estallido desproporcionado... sea cual sea el
motivo. (12A)
Más en el