Guayaquil. 01 jun 2000. Los principales afectados son los
productores. En otros países se les paga cuatro y hasta cinco
dólares por cada caja.
La sobreproducción mundial del banano dejará este año sin colocar
entre 40 y 50 millones de cajas, cifra que puede aumentar para el
2005 a un millón de toneladas.
Entonces, la oferta será de 13,7 millones ante una demanda de 12,8
millones, según la Organización de Naciones Unidas para la
Agricultura y Alimentación (FAO). Pronósticos fríos frente a los
efectos que se sienten al interior de los países productores:
recortes de personal en las bananeras, bajas de precios
incapacidad para seguir produciendo...
La primera en sentir esa perturbación fue la comercializadora
multinacional Dole Food Co. que a principios de año redujo 17 por
ciento su negocio, despidió a 1 500 de 53 500 empleados en todo el
mundo, en especial en Venezuela y Nicaragua, según Wall Street
Journal.
En el propio Ecuador hace tres semanas Chiquita abandonó a su
socio estratégico Reybanpac a la que compraba un 30 por ciento de
su producción.
Al problema le sigue la caída de precios, como la rebaja de USD
7,50 a 5,25 por la caja de 18 kilos en el mercado ruso dos semanas
atrás. Los entendidos dicen que esto se originó en un repentino
aumento de cajas ecuatorianas en ese país, de 700 mil a 1,5
millones.
De este escenario se señala como responsable al primer exportador
mundial: Ecuador. Según AFP, Gabriel Beteta, representante de los
trabajadores de la Tela Railroad, subsidiaria de Chiquita en
Honduras -que anunció bajar su plantilla en 43 por ciento, de 3
500 a 2 mil empleados- dijo que "la compañía aduce que se tiene
que despedir a la gente porque Ecuador ha saturado el mercado".
La evidencia: las ventas de Costa Rica, segundo exportador,
crecieron 1,7 por ciento; de Colombia, tercer exportador, 0,9 por
ciento; y de Ecuador, 3,8, contra un recatado aumento de la
demanda: 1,9 por ciento.
El gerente de la Corporación Bananera Nacional (Corbana) de Costa
Rica, Jorge Sauma, cifró la sobreoferta en 70 millones de cajas de
18 kilos, en un mercado mundial de 577 millones.
Sauma dijo a EFE que es difícil competir con Ecuador por sus bajos
costos de producción. Afirmó que de seguir así, este año caerán
los ingresos por la exportación en USD 100 millones, actividad que
el año pasado generó USD 600 millones.
"El problema viene incubándose desde hace cinco años". Pero las
autoridades de ese país atribuyen la crisis a la falta de mercado,
sobre todo por las restricciones europeas.
Sauma responsabilizó a Ecuador por sus escasas regulaciones
laborales y ambientales lo que le permite tener menores costos.
Para Sergio Seminario, presidente de la Asociación de Exportadores
de Banano del Ecuador (AEBE), la imagen de culpabilidad provino de
los mismos productores locales, al quejarse de la sobresiembra de
30 mil hectáreas desde que desapareció el Programa del Banano
(1998). "Hoy se quiere controlar la oferta por ley regalando 13
por ciento de la producción nacional".
"Los demás países aprovecharán para llegar a mercados
insatisfechos, cuando la mejor estrategia hubiese sido que entre
todos se rebajen los niveles de ventas, según la proporción de
incidencia mundial".
Pero Enrique Gómez, presidente de la Corporación Nacional de
Bananeros (Conaban) dice: "nadie me puede decir que en Costa Rica
o Colombia hay sobreoferta cuando comercializan la fruta entre USD
4 y 5 la caja. Si así fuera, solo comprarán en Ecuador, que se
vende en USD 1,50 la unidad (la caja)".
José Nieto, vocal de la Asociación de Bananeros de El Oro (ABO),
cree que si bien la sobreoferta es mundial, "los exportadores
quiebran los mercados externos saturándolos de fruta ecuatoriana
barata que baja los precios a niveles insostenibles".
Esto determina que, aunque se colocara toda la fruta, el productor
quiebre: "¿qué beneficio obtengo de que se venda toda mi fruta si
no me alcanza la plata para mantener mis plantaciones?", se
pregunta Gómez.
Mientras estas disputas no terminan, la guerra de ofertas continúa
en los mercados de consumidores de EE.UU. y Europa,
principalmente, que salen beneficiados de la sobreoferta y la
consecuente caída de precios.
Aumentar licencias a la UE * Con la sanción de USD 201,6 millones
que autorizó la Organización Mundial de Comercio (OMC) contra la
Unión Europea (UE), por aplicar restricciones a la importación del
fruto, se puede negociar que la UE acepte más banano. "Subir la
cuota a 300 mil toneladas semanales, con lo que aumentará la venta
a 50 millones de cajas de las 37 actuales", dice José Nieto del
gremios de bananeros de El Oro.
Los excedentes del fruto * La Ley que se tramita en el Congreso
Nacional, rebajará la oferta ecuatoriana en 500 mil racimos de la
fruta, de los 4 millones que se colocan semanalmente. Los
productores proponen crear un fideicomiso, que se fondee con los
USD 0,20 por caja comprada descontada por los exportadores. La
fruta se distribuiría a iglesias, centros educativos y sectores
marginales en el interior del país.
Más competitividad * La Asociación de Exportadores propone captar
los mercados externos con precios bajos para posicionarse en
temporada. "La ventaja de Ecuador sobre los demás es el bajo costo
de producción", dice Sergio Seminario, presidente de AEBE. Así,
los exportadores pueden garantizar un precio base de USD 1,80 al
productor para aumentar el 50 por ciento que se coloca en la Unión
Europea y EE.UU. (Texto tomado de El Comercio)
productores. En otros países se les paga cuatro y hasta cinco
dólares por cada caja.
La sobreproducción mundial del banano dejará este año sin colocar
entre 40 y 50 millones de cajas, cifra que puede aumentar para el
2005 a un millón de toneladas.
Entonces, la oferta será de 13,7 millones ante una demanda de 12,8
millones, según la Organización de Naciones Unidas para la
Agricultura y Alimentación (FAO). Pronósticos fríos frente a los
efectos que se sienten al interior de los países productores:
recortes de personal en las bananeras, bajas de precios
incapacidad para seguir produciendo...
La primera en sentir esa perturbación fue la comercializadora
multinacional Dole Food Co. que a principios de año redujo 17 por
ciento su negocio, despidió a 1 500 de 53 500 empleados en todo el
mundo, en especial en Venezuela y Nicaragua, según Wall Street
Journal.
En el propio Ecuador hace tres semanas Chiquita abandonó a su
socio estratégico Reybanpac a la que compraba un 30 por ciento de
su producción.
Al problema le sigue la caída de precios, como la rebaja de USD
7,50 a 5,25 por la caja de 18 kilos en el mercado ruso dos semanas
atrás. Los entendidos dicen que esto se originó en un repentino
aumento de cajas ecuatorianas en ese país, de 700 mil a 1,5
millones.
De este escenario se señala como responsable al primer exportador
mundial: Ecuador. Según AFP, Gabriel Beteta, representante de los
trabajadores de la Tela Railroad, subsidiaria de Chiquita en
Honduras -que anunció bajar su plantilla en 43 por ciento, de 3
500 a 2 mil empleados- dijo que "la compañía aduce que se tiene
que despedir a la gente porque Ecuador ha saturado el mercado".
La evidencia: las ventas de Costa Rica, segundo exportador,
crecieron 1,7 por ciento; de Colombia, tercer exportador, 0,9 por
ciento; y de Ecuador, 3,8, contra un recatado aumento de la
demanda: 1,9 por ciento.
El gerente de la Corporación Bananera Nacional (Corbana) de Costa
Rica, Jorge Sauma, cifró la sobreoferta en 70 millones de cajas de
18 kilos, en un mercado mundial de 577 millones.
Sauma dijo a EFE que es difícil competir con Ecuador por sus bajos
costos de producción. Afirmó que de seguir así, este año caerán
los ingresos por la exportación en USD 100 millones, actividad que
el año pasado generó USD 600 millones.
"El problema viene incubándose desde hace cinco años". Pero las
autoridades de ese país atribuyen la crisis a la falta de mercado,
sobre todo por las restricciones europeas.
Sauma responsabilizó a Ecuador por sus escasas regulaciones
laborales y ambientales lo que le permite tener menores costos.
Para Sergio Seminario, presidente de la Asociación de Exportadores
de Banano del Ecuador (AEBE), la imagen de culpabilidad provino de
los mismos productores locales, al quejarse de la sobresiembra de
30 mil hectáreas desde que desapareció el Programa del Banano
(1998). "Hoy se quiere controlar la oferta por ley regalando 13
por ciento de la producción nacional".
"Los demás países aprovecharán para llegar a mercados
insatisfechos, cuando la mejor estrategia hubiese sido que entre
todos se rebajen los niveles de ventas, según la proporción de
incidencia mundial".
Pero Enrique Gómez, presidente de la Corporación Nacional de
Bananeros (Conaban) dice: "nadie me puede decir que en Costa Rica
o Colombia hay sobreoferta cuando comercializan la fruta entre USD
4 y 5 la caja. Si así fuera, solo comprarán en Ecuador, que se
vende en USD 1,50 la unidad (la caja)".
José Nieto, vocal de la Asociación de Bananeros de El Oro (ABO),
cree que si bien la sobreoferta es mundial, "los exportadores
quiebran los mercados externos saturándolos de fruta ecuatoriana
barata que baja los precios a niveles insostenibles".
Esto determina que, aunque se colocara toda la fruta, el productor
quiebre: "¿qué beneficio obtengo de que se venda toda mi fruta si
no me alcanza la plata para mantener mis plantaciones?", se
pregunta Gómez.
Mientras estas disputas no terminan, la guerra de ofertas continúa
en los mercados de consumidores de EE.UU. y Europa,
principalmente, que salen beneficiados de la sobreoferta y la
consecuente caída de precios.
Aumentar licencias a la UE * Con la sanción de USD 201,6 millones
que autorizó la Organización Mundial de Comercio (OMC) contra la
Unión Europea (UE), por aplicar restricciones a la importación del
fruto, se puede negociar que la UE acepte más banano. "Subir la
cuota a 300 mil toneladas semanales, con lo que aumentará la venta
a 50 millones de cajas de las 37 actuales", dice José Nieto del
gremios de bananeros de El Oro.
Los excedentes del fruto * La Ley que se tramita en el Congreso
Nacional, rebajará la oferta ecuatoriana en 500 mil racimos de la
fruta, de los 4 millones que se colocan semanalmente. Los
productores proponen crear un fideicomiso, que se fondee con los
USD 0,20 por caja comprada descontada por los exportadores. La
fruta se distribuiría a iglesias, centros educativos y sectores
marginales en el interior del país.
Más competitividad * La Asociación de Exportadores propone captar
los mercados externos con precios bajos para posicionarse en
temporada. "La ventaja de Ecuador sobre los demás es el bajo costo
de producción", dice Sergio Seminario, presidente de AEBE. Así,
los exportadores pueden garantizar un precio base de USD 1,80 al
productor para aumentar el 50 por ciento que se coloca en la Unión
Europea y EE.UU. (Texto tomado de El Comercio)
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