Quito. 5 abr 98. No había parado de llover desde el mediodía
del martes pasado en el sector de Chilcapamba al sur de
Cuenca, cuando cerca de las ocho de la noche la tierra comenzó
a moverse.
Unos 15 metros de terreno frente a la casa de Olga Sarmiento,
ubicada a un costado de la vía al valle, se hundió de
improviso arrastrando consigo la alambrada, las plantas de
durazno y aguacate así como el poste de luz instalado en este
sitio.
La vivienda de dos pisos todavía en construcción quedó a menos
de un metro del barranco que se formó en pocos minutos. Esa
misma noche la familia Morocho, que la habitaba, la abandonó
por recomendación del Cuerpo de Bomberos.
Ayer el gigantesco árbol de eucalipto, que perdió el
equilibrio con el derrumbe, estaba hecho pedazos a un lado de
la carretera mientras los moradores intentaban contener el
deslizamiento del cerro. El cableado de energía permanecía
entre el suelo y el lodo, algunas viviendas del sector no
disponían del servicio.
No es el único problema en Chilcapamba, otras casas ubicadas
en el filo de la ladera estarían en riesgo por la fragilidad
del terreno si las lluvias continúan con la misma intensidad
de los últimos días.
Casi dos metros de la parte trasera de la mecánica de Saúl
Saquicela está en el aire. La tierra se hunde cada día y las
soldadoras, cortadoras y más herramientas tienen que moverse
según el terreno disponible. El deslizamiento aumentó a raíz
de que un vecino, al que vendió parte de su propiedad, sacó la
base del cerro para nivelar el terreno y construir una pared.
En otras partes del sector la tierra tiene grietas por donde
filtran las lluvias.
Las historias de desolación, pobreza e incertidumbre que deja
el paso de El Niño se parecen y no dejan de producirse.
En Musicata, al sur de la provincia de Cuenca, María Remache
había pasado toda la noche despierta. Desde las 22h00 empezó a
llover y escuchó la correntada cargada de piedras que bajaba
frente a su casa, por la vía vieja que conduce a Baños.
Estaba sola, acostada en esa cama de madera que la había
acogido todos estos años, pero cuando quiso levantarse sus
pies se encontraron con un río. El chillido de los cuyes que
tenía en la parte de atrás de la casa la impulsaron a salir
hasta el patio. Los pequeños tubos de drenaje que están en ese
sitio quedaron tapados de basura y desechos y no habían podido
evacuar el agua.
Minutos después el nivel del agua dentro de su casa ya estaba
sobre los 50 centímetros y la cama vieja pronto quedó
sumergida, mientras los utensilios de cocina comenzaron a
navegar por ese improvisada piscina en que se convirtió la
vivienda.
Iguales historias ocurrían la madrugada del sábado en otros 19
hogares de Misicata, la mayoría de familias de origen humilde
que observaba cómo las paredes de adobe se remojaban.
La capacidad de las tuberías de drenaje instaladas por la
Municipalidad en la vía antigua que comunica Cuenca con Baños
fue superada por la intensidad de las lluvias, además la
correntada bajó acompañada de palos, piedras y pedazos de
asfalto que taponaron mucho más los canales.
El agua bajó a las 06h00 del sábado pero las consecuencias se
mantienen en estas casas. Por ejemplo el piso de madera del
dormitorio de María Remache comenzó a hundirse mientras los
muebles, trapos y colchones se secaban al sol en el patio.
Otras familias con mayores recursos contrataron bombas para
evacuar el agua de sus casas y tractores para arreglar la vía.
Grandes tramos de la carretera permanecen llenos de piedras y
palos lo que dificulta la circulación.
Otros sectores que resultaron inundados, pero en menor
intensidad, fueron Simón Bolívar, Yanuncay, Wizhil y El
Arenal, en este último sector las instalaciones de diario El
Mercurio se vieron sensiblemente afectadas.
En Guayaquil una persona murió por leptospirosis
El viernes murió por leptospirosis un paciente en el Hospital
de Infectología de Guayaquil. Y hasta hoy se registran 7
hospitalizados por ese mal, 11 casos por cólera confirmados y
cerca de 30 sospechosos, también en la ciudad. A Gabriel
Párraga, 19 años, de la Cooperativa Juan Montalvo el cuadro de
leptospirosis se le complicó y murió luego de 48 horas. Ni
siquiera el respirador y los antibióticos que le fueron
administrados lo pudieron ayudar. Eduardo Sandoval, director
técnico del Hospital de Infectología, dice que esta muerte
está dentro del porcentaje normal de defunciones que presenta
la leptospirosis. "Hay pacientes que reaccionan así, y a pesar
de recibir el tratamiento adecuado, mueren".
En semanas pasadas la leptospirosis experimentó una curva de
descenso. Pero, por el carácter endémico de la enfermedad, los
casos se siguen presentando.
Por su parte, el cólera avanza con lentitud. Esto no significa
que esté controlado, la ciudadanía no se puede confiar.
Víctor Hugo Mite, director provincial de Salud, no se explica
por qué hasta ahora no se ha desatado la epidemia, pese a las
pésimas condiciones sanitarias registradas. En Guayaquil se
han presentado casos aislados, pero cada día llegan a los
hospitales varios pacientes sospechosos.
Las autoridades de salud han tomado acciones. El miércoles
pasado se realizó un operativo en el mercado de Pedro Pablo
Gómez. Con la ayuda de la Defensa Civil, el Cuerpo de
Bomberos, Vachagnon, Sanidad... desinfectaron el mercado con
cloro, fumigaron y desratizaron el lugar. A pesar de esto, el
viernes el cuadro en el mercado era el mismo de siempre:
frutas y vegetales en el suelo, acumulación de basura...
suciedad por doquier. Por esto se van a tomar otro tipo de
acciones.
La próxima semana, posiblemente el miércoles, se inspeccionará
el mercado y se confiscarán las mercancías a todos aquellos
comerciantes que no cumplan las normas de aseo. Luego serán
entregadas a los albergues de damnificados por El Niño. El
Gobernador dio su autorización. Mite está consciente que esta
medida perjudicará económicamente a los minoristas, pero dice
que es la única manera de concientizarlos y prevenir.
Redacción Guayaquil.
Las radios también tienen millonarias pérdidas...
Entre 15 y 20 millones de sucres diarios es el perjuicio para
cada radio emisora como resultado de los deslaves del Cerro
Azul.
La problemática al momento gira en los acuerdos que al parecer
cada radio propondrá a sus anunciantes para posponer la
emisión de los espacios publicitarios ya contratados.
Sonia Rosero, gerente comercial de Radio Punto Rojo y Radio
Romance, calcula que para una radio que promedie entre 150 y
200 cuñas al día, esto multiplicado por los diez días que se
pronostica se tardarán en reponer el fluido eléctrico en la
zona, o en la re-ubicación de las antenas (cada una valorada
en por lo menos unos USD 10.000), tendría pérdidas cercanas a
doscientos millones de sucres por cada radio emisora de la
ciudad.
Y aunque según Rosero, las programaciones normales diarias se
respetarán, "la carga publicitaria -una vez se arregle el
problema- será mucho más fuerte, y quizás se entorpezcan los
horarios y el desarrollo de los programas en vivo, a más que
con ese compromiso adquirido, difícilmente se podrán aceptar
nuevos clientes".
Octavio García, director de Radio Rumba, expone los costos
operativos que han tenido que afrontar las radios por este
imprevisto.
"Entre adquirir un generador eléctrico con su debida
instalación que asciende por lo menos unos 50 millones de
sucres", afirmó, sin contar con el riesgo que significa
mantener el equipo en ese lugar por las condiciones del
terreno. Un ejecutivo de Tropicálida observa además el
perjuicio que se viene para las casas disqueras que deberán
volver a planificar la promoción de sus materiales
discográficos en las distintas radios.
Las afectadas son en su mayoría las de frecuencia en F.M.
La única noticia alentadora para los dueños, productores y
ejecutivos de radios es que el fenómeno de El Niño poco a poco
se va atenuando. Según el Centro de Investigaciones
Científicas y Tecnológicas de la Escuela Superior Politécnica
del Litoral (Espol), el proceso se va dando gradualmente. La
Espol indica que, según las proyecciones, la cantidad de
lluvia en abril será menor que en meses pasados. Redacción
Guayaquil
Así está el país
* Brigadas de seguridad * La seguridad también es otro de los
temas que preocupa en los sitios afectados por el fenómeno de
El Niño. La Policía Nacional solicitó al Gobernador del Azuay
un mayor número de efectivos para el sector de Ponce Enríquez.
Además informó que se crearán brigadas de seguridad ciudadana
para apoyar a todos los pobladores mientras dure el fenómeno.
Los representantes del Ministerio de la Vivienda anunciaron
que a finales de abril o inicios de mayo se empezará con la
construcción de viviendas en las parroquias afectadas:
Molleturo, Cumbe y Ponce Enríquez. Son 119 casas. Cada una de
ellas tiene 40 metros cuadrados. Existe un presupuesto de
1.100 millones de sucres para las obras.
* La evaluación de locales * La Dinace (Dirección Nacional de
Construcciones Escolares) empezará la reconstrucción de los
locales afectados por el fenómeno de El Niño en el Guayas, una
vez reciba el informe por parte de la Dirección Provincial de
Educación. La directora de Educación, Rita Silva de Garcés,
solicitó a los directores de jardines, escuelas y colegios
fiscales presentar el 30 de marzo un reporte de condiciones en
sus locales escolares. En base a esto se realizará una lista,
que será entregada a la Dinace.
* Venezuela ayuda al país * La ayuda proveniente de Venezuela
para los damnificados por El Niño llegó al país. Consiste en
13 mil kilos de medicinas, con un costo de 800 mil dólares, la
misma que será distribuida por la Defensa Civil en las
provincias más afectadas. La donación también comprende
antibióticos, sueros, antialérgicos, antinicóticos,
antidiarreicos, un stock de vendas de distintos tamaños y
material médico quirúrgico, que han sido transportados en un
avión Hércules C-130 de la Fuerza Aérea Venezolana. Fredy
Christians, embajador venezolano en el Ecuador señaló que este
gesto de solidaridad del Gobierno de su país es una muestra de
hermandad con los ecuatorianos que están viviendo el dolor de
perderlo todo.
* Las lluvias disminuyen * La Escuela Superior Politécnica del
Litoral (Espol) indica que, según las proyecciones, la
cantidad de lluvia en abril será menor que en meses pasados.
Esto no implica que durante este mes el nivel de lluvias será
igual al registrado en condiciones normales. En abril las
lluvias tendrán un promedio de un 2.9 por sobre el nivel
normal. Es decir, se esperan entre 400 y 500 mm frente a los
165 mm registrados normalmente. En marzo el nivel de
precipitaciones fue de 900 mm, el promedio fue de 3.6 veces
más de lo normal considerando que normalmente se registran 250
mm. El organismo indicó que, debido al gran acumulado de
lluvias que ha experimentado la Costa en estos seis meses y a
las condiciones precarias de infraestructura de varias
poblaciones, aún se deben esperar problemas de consideración
debido a El Niño.
* Un ejemplo de solidaridad * Amanda Merrit es una ecuatoriana
que reside desde hace 34 años en Estados Unidos. Conmovida por
la tragedia que afecta a miles de ecuatorianos del Litoral,
emprendió una campaña de recolección de ropa, zapatos,
vituallas y otros artículos para ayudar a los damnificados.
Con una tarea intensa de hasta 10 horas diarias, logró su
propósito. Merrit también asistió a los ecuatorianos que
fueron trasladados al Hospital de Houston por las graves
quemaduras producto del incendio de Esmeraldas. También
cooperó con las víctimas del accidentes aviatorio de Manta.
(Texto tomado de El Comercio)
del martes pasado en el sector de Chilcapamba al sur de
Cuenca, cuando cerca de las ocho de la noche la tierra comenzó
a moverse.
Unos 15 metros de terreno frente a la casa de Olga Sarmiento,
ubicada a un costado de la vía al valle, se hundió de
improviso arrastrando consigo la alambrada, las plantas de
durazno y aguacate así como el poste de luz instalado en este
sitio.
La vivienda de dos pisos todavía en construcción quedó a menos
de un metro del barranco que se formó en pocos minutos. Esa
misma noche la familia Morocho, que la habitaba, la abandonó
por recomendación del Cuerpo de Bomberos.
Ayer el gigantesco árbol de eucalipto, que perdió el
equilibrio con el derrumbe, estaba hecho pedazos a un lado de
la carretera mientras los moradores intentaban contener el
deslizamiento del cerro. El cableado de energía permanecía
entre el suelo y el lodo, algunas viviendas del sector no
disponían del servicio.
No es el único problema en Chilcapamba, otras casas ubicadas
en el filo de la ladera estarían en riesgo por la fragilidad
del terreno si las lluvias continúan con la misma intensidad
de los últimos días.
Casi dos metros de la parte trasera de la mecánica de Saúl
Saquicela está en el aire. La tierra se hunde cada día y las
soldadoras, cortadoras y más herramientas tienen que moverse
según el terreno disponible. El deslizamiento aumentó a raíz
de que un vecino, al que vendió parte de su propiedad, sacó la
base del cerro para nivelar el terreno y construir una pared.
En otras partes del sector la tierra tiene grietas por donde
filtran las lluvias.
Las historias de desolación, pobreza e incertidumbre que deja
el paso de El Niño se parecen y no dejan de producirse.
En Musicata, al sur de la provincia de Cuenca, María Remache
había pasado toda la noche despierta. Desde las 22h00 empezó a
llover y escuchó la correntada cargada de piedras que bajaba
frente a su casa, por la vía vieja que conduce a Baños.
Estaba sola, acostada en esa cama de madera que la había
acogido todos estos años, pero cuando quiso levantarse sus
pies se encontraron con un río. El chillido de los cuyes que
tenía en la parte de atrás de la casa la impulsaron a salir
hasta el patio. Los pequeños tubos de drenaje que están en ese
sitio quedaron tapados de basura y desechos y no habían podido
evacuar el agua.
Minutos después el nivel del agua dentro de su casa ya estaba
sobre los 50 centímetros y la cama vieja pronto quedó
sumergida, mientras los utensilios de cocina comenzaron a
navegar por ese improvisada piscina en que se convirtió la
vivienda.
Iguales historias ocurrían la madrugada del sábado en otros 19
hogares de Misicata, la mayoría de familias de origen humilde
que observaba cómo las paredes de adobe se remojaban.
La capacidad de las tuberías de drenaje instaladas por la
Municipalidad en la vía antigua que comunica Cuenca con Baños
fue superada por la intensidad de las lluvias, además la
correntada bajó acompañada de palos, piedras y pedazos de
asfalto que taponaron mucho más los canales.
El agua bajó a las 06h00 del sábado pero las consecuencias se
mantienen en estas casas. Por ejemplo el piso de madera del
dormitorio de María Remache comenzó a hundirse mientras los
muebles, trapos y colchones se secaban al sol en el patio.
Otras familias con mayores recursos contrataron bombas para
evacuar el agua de sus casas y tractores para arreglar la vía.
Grandes tramos de la carretera permanecen llenos de piedras y
palos lo que dificulta la circulación.
Otros sectores que resultaron inundados, pero en menor
intensidad, fueron Simón Bolívar, Yanuncay, Wizhil y El
Arenal, en este último sector las instalaciones de diario El
Mercurio se vieron sensiblemente afectadas.
En Guayaquil una persona murió por leptospirosis
El viernes murió por leptospirosis un paciente en el Hospital
de Infectología de Guayaquil. Y hasta hoy se registran 7
hospitalizados por ese mal, 11 casos por cólera confirmados y
cerca de 30 sospechosos, también en la ciudad. A Gabriel
Párraga, 19 años, de la Cooperativa Juan Montalvo el cuadro de
leptospirosis se le complicó y murió luego de 48 horas. Ni
siquiera el respirador y los antibióticos que le fueron
administrados lo pudieron ayudar. Eduardo Sandoval, director
técnico del Hospital de Infectología, dice que esta muerte
está dentro del porcentaje normal de defunciones que presenta
la leptospirosis. "Hay pacientes que reaccionan así, y a pesar
de recibir el tratamiento adecuado, mueren".
En semanas pasadas la leptospirosis experimentó una curva de
descenso. Pero, por el carácter endémico de la enfermedad, los
casos se siguen presentando.
Por su parte, el cólera avanza con lentitud. Esto no significa
que esté controlado, la ciudadanía no se puede confiar.
Víctor Hugo Mite, director provincial de Salud, no se explica
por qué hasta ahora no se ha desatado la epidemia, pese a las
pésimas condiciones sanitarias registradas. En Guayaquil se
han presentado casos aislados, pero cada día llegan a los
hospitales varios pacientes sospechosos.
Las autoridades de salud han tomado acciones. El miércoles
pasado se realizó un operativo en el mercado de Pedro Pablo
Gómez. Con la ayuda de la Defensa Civil, el Cuerpo de
Bomberos, Vachagnon, Sanidad... desinfectaron el mercado con
cloro, fumigaron y desratizaron el lugar. A pesar de esto, el
viernes el cuadro en el mercado era el mismo de siempre:
frutas y vegetales en el suelo, acumulación de basura...
suciedad por doquier. Por esto se van a tomar otro tipo de
acciones.
La próxima semana, posiblemente el miércoles, se inspeccionará
el mercado y se confiscarán las mercancías a todos aquellos
comerciantes que no cumplan las normas de aseo. Luego serán
entregadas a los albergues de damnificados por El Niño. El
Gobernador dio su autorización. Mite está consciente que esta
medida perjudicará económicamente a los minoristas, pero dice
que es la única manera de concientizarlos y prevenir.
Redacción Guayaquil.
Las radios también tienen millonarias pérdidas...
Entre 15 y 20 millones de sucres diarios es el perjuicio para
cada radio emisora como resultado de los deslaves del Cerro
Azul.
La problemática al momento gira en los acuerdos que al parecer
cada radio propondrá a sus anunciantes para posponer la
emisión de los espacios publicitarios ya contratados.
Sonia Rosero, gerente comercial de Radio Punto Rojo y Radio
Romance, calcula que para una radio que promedie entre 150 y
200 cuñas al día, esto multiplicado por los diez días que se
pronostica se tardarán en reponer el fluido eléctrico en la
zona, o en la re-ubicación de las antenas (cada una valorada
en por lo menos unos USD 10.000), tendría pérdidas cercanas a
doscientos millones de sucres por cada radio emisora de la
ciudad.
Y aunque según Rosero, las programaciones normales diarias se
respetarán, "la carga publicitaria -una vez se arregle el
problema- será mucho más fuerte, y quizás se entorpezcan los
horarios y el desarrollo de los programas en vivo, a más que
con ese compromiso adquirido, difícilmente se podrán aceptar
nuevos clientes".
Octavio García, director de Radio Rumba, expone los costos
operativos que han tenido que afrontar las radios por este
imprevisto.
"Entre adquirir un generador eléctrico con su debida
instalación que asciende por lo menos unos 50 millones de
sucres", afirmó, sin contar con el riesgo que significa
mantener el equipo en ese lugar por las condiciones del
terreno. Un ejecutivo de Tropicálida observa además el
perjuicio que se viene para las casas disqueras que deberán
volver a planificar la promoción de sus materiales
discográficos en las distintas radios.
Las afectadas son en su mayoría las de frecuencia en F.M.
La única noticia alentadora para los dueños, productores y
ejecutivos de radios es que el fenómeno de El Niño poco a poco
se va atenuando. Según el Centro de Investigaciones
Científicas y Tecnológicas de la Escuela Superior Politécnica
del Litoral (Espol), el proceso se va dando gradualmente. La
Espol indica que, según las proyecciones, la cantidad de
lluvia en abril será menor que en meses pasados. Redacción
Guayaquil
Así está el país
* Brigadas de seguridad * La seguridad también es otro de los
temas que preocupa en los sitios afectados por el fenómeno de
El Niño. La Policía Nacional solicitó al Gobernador del Azuay
un mayor número de efectivos para el sector de Ponce Enríquez.
Además informó que se crearán brigadas de seguridad ciudadana
para apoyar a todos los pobladores mientras dure el fenómeno.
Los representantes del Ministerio de la Vivienda anunciaron
que a finales de abril o inicios de mayo se empezará con la
construcción de viviendas en las parroquias afectadas:
Molleturo, Cumbe y Ponce Enríquez. Son 119 casas. Cada una de
ellas tiene 40 metros cuadrados. Existe un presupuesto de
1.100 millones de sucres para las obras.
* La evaluación de locales * La Dinace (Dirección Nacional de
Construcciones Escolares) empezará la reconstrucción de los
locales afectados por el fenómeno de El Niño en el Guayas, una
vez reciba el informe por parte de la Dirección Provincial de
Educación. La directora de Educación, Rita Silva de Garcés,
solicitó a los directores de jardines, escuelas y colegios
fiscales presentar el 30 de marzo un reporte de condiciones en
sus locales escolares. En base a esto se realizará una lista,
que será entregada a la Dinace.
* Venezuela ayuda al país * La ayuda proveniente de Venezuela
para los damnificados por El Niño llegó al país. Consiste en
13 mil kilos de medicinas, con un costo de 800 mil dólares, la
misma que será distribuida por la Defensa Civil en las
provincias más afectadas. La donación también comprende
antibióticos, sueros, antialérgicos, antinicóticos,
antidiarreicos, un stock de vendas de distintos tamaños y
material médico quirúrgico, que han sido transportados en un
avión Hércules C-130 de la Fuerza Aérea Venezolana. Fredy
Christians, embajador venezolano en el Ecuador señaló que este
gesto de solidaridad del Gobierno de su país es una muestra de
hermandad con los ecuatorianos que están viviendo el dolor de
perderlo todo.
* Las lluvias disminuyen * La Escuela Superior Politécnica del
Litoral (Espol) indica que, según las proyecciones, la
cantidad de lluvia en abril será menor que en meses pasados.
Esto no implica que durante este mes el nivel de lluvias será
igual al registrado en condiciones normales. En abril las
lluvias tendrán un promedio de un 2.9 por sobre el nivel
normal. Es decir, se esperan entre 400 y 500 mm frente a los
165 mm registrados normalmente. En marzo el nivel de
precipitaciones fue de 900 mm, el promedio fue de 3.6 veces
más de lo normal considerando que normalmente se registran 250
mm. El organismo indicó que, debido al gran acumulado de
lluvias que ha experimentado la Costa en estos seis meses y a
las condiciones precarias de infraestructura de varias
poblaciones, aún se deben esperar problemas de consideración
debido a El Niño.
* Un ejemplo de solidaridad * Amanda Merrit es una ecuatoriana
que reside desde hace 34 años en Estados Unidos. Conmovida por
la tragedia que afecta a miles de ecuatorianos del Litoral,
emprendió una campaña de recolección de ropa, zapatos,
vituallas y otros artículos para ayudar a los damnificados.
Con una tarea intensa de hasta 10 horas diarias, logró su
propósito. Merrit también asistió a los ecuatorianos que
fueron trasladados al Hospital de Houston por las graves
quemaduras producto del incendio de Esmeraldas. También
cooperó con las víctimas del accidentes aviatorio de Manta.
(Texto tomado de El Comercio)
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