Sucumbíos. 13 feb 2001. La Cruz Roja Ecuatoriana fue una de las primeras
instituciones en ayudar a los desplazados.
La Cruz Roja Ecuatoriana (CRE) hizo la entrega de alimentos, bidones y
sábanas a los 272 campesinos ecuatorianos que se han desplazado de sus
tierras por temor a venganzas de paramilitares.
La entrega se hizo ayer en los tres albergues improvisados (Jambelí,
Cascales y Foquisa). Un camión facilitado por el Municipio de Cascales
ayudó en la entrega.
El convoy humanitario salió de Lago Agrio a las 08h00 y participaron tres
vehículos, 20 socorristas voluntarios y directivos de la Cruz Roja
nacional y provincial de Sucumbíos.
La Cruz Roja Ecuatoriana ha podido hacer entrega de estas vituallas
gracias al apoyo económico del Comité Internacional de la Cruz Roja
(CICR). La próxima ayuda se dará en quince días, dijo Ricardo Camacho,
director de comunicación de la CRE.
Más ayuda
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los refugiados (Acnur),
la Conferencia Episcopal Ecuatoriana y la iglesia de San Miguel de
Sucumbíos entregaron materiales para la práctica médica a los centros de
salud de la frontera y al hospital de Lago Agrio.
José Samaniego, representante de la Acnur para América Latina, indicó que
el aporte de las tres instituciones es de 38 mil dólares y comprende
materiales como computadoras, colchones, muebles, cilindros de gas,
lámparas y otros objetos.
"Queremos que los refugiados no se conviertan en una carga sino que
aporten al desarrollo del Ecuador", dijo Samaniego.
Las familias indígenas desplazadas de la frontera norte exigen la
inmediata reanudación de clases para más de 125 niños.
El padre Edgar Pinos, coordinador del programa de Atención a los
Refugiados, expresó que el Ministerio de Relaciones Exteriores ha
legalizado la presencia de 750 colombianos, quienes ahora gozan de los
mismos derechos que los ecuatorianos.
El religioso resaltó que aún faltan por legalizarse por los menos unos
dos mil colombianos, quienes huyeron de la violencia que hay en su país,
especialmente en la zona limítrofe.
El padre dio a conocer que la iglesia de la provincia de Francisco de
Orellana ha expresado su voluntad de colaborar con la recepción de
refugiados colombianos, por lo que ya se han informado de las experiencia
de la iglesia de Sucumbíos en este asunto.
Indicó además que están listos los albergues de General Farfán, Puerto El
Carmen, Torres Quichimbo y la casa de las organizaciones en Nueva Loja.
"La Acnur ha gastado unos 450 mil dólares en la construcción y
readecuación de los albergues", señaló.
Mientras la ayuda se intensifica, el movimiento de los desplazados
continúa.
Este es el caso de un matrimonio que, con sus cuatro hijos en hombros,
huyeron de la zona limítrofe con Colombia luego que el pasado sábado
oyeron gran cantidad de disparos.
Según versiones de la CRE basadas en declaraciones de los desplazados, el
tiroteo duró aproximadamente 30 minutos.
La familia, que está alojada en el albergue de Jambelí, encontró a una
vecina con sus dos hijos, quienes también escaparon de la línea
fronteriza. Estos colonos señalaron que eran los últimos en salir y que
ahora sí se asustaron de verdad, se añade en el reporte.
PATRULLAS
Las rondas militares ecuatorianas se incrementaron en la frontera norte
en la zona de Santa Rosa, en donde hace un mes se encontró un laboratorio
clandestino que procesaba coca.
El gobernador de Sucumbíos, Víctor Velazco, lamentó que los militares
traten de "tapar" la información sobre la actuación de grupos armados
extraños en territorio ecuatoriano.
"Los uniformados tampoco responden al pedido de los indígenas
desplazados", dijo el Gobernador de Sucumbíos, Víctor Velazco, quien
reclama que se hagan rondas en las riberas de los ríos San Miguel y
Bermejo.
El TCrnel. Jorge Velasco, de la Brigada de Selva Tungurahua, no quiso
hablar sobre la denuncia del Gobernador.
El prefecto de Sucumbíos, Luis Bermeo, solicitó ayer a la Alta Comisaría
de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) que incluya a los
ecuatorianos en el plan de asistencia para desplazados colombianos que
lleva a cabo en la frontera entre ambos países.
Posta en las Gobernaciones
QUITO.- El régimen inició la renovación de sus representaciones en varias
provincias del país con la posesión el jueves pasado del nuevo gobernador
de Orellana, el coronel en servicio pasivo, Agustín Alejandro Luna.
Este cambio se da cuando los conflictos en la zona fronteriza se han
agravado en los últimos días por las amenazas de los paramilitares
colombianos a las poblaciones ecuatorianas en la frontera.
La designación responde a la decisión de la administración del presidente
Gustavo Noboa de contar con gobernadores con experiencia militar en esta
zona del país, como lo anunció hace un mes el ministro de Gobierno, Juan
Manrique, por los conflictos presentados en la frontera.
El flamante gobernador tendrá las funciones de coordinar con las
autoridades locales el tráfico y tránsito en el río Napo para cumplir los
convenios de integración fronteriza con el Perú, así como la circulación
en el sector de Rocafuerte en Ecuador y Pantoja en el Perú.
El funcionario, dijo el diputado amazónico Estuardo Hidalgo del Frente
Radical Alfarista (FRA), "tiene un nivel de preparación importante,
trabaja en la empresa privada de la provincia y sobre todo, vive y conoce
los requerimientos de la zona".
El próximo cambio será en la provincia de Pastaza, cuyo actual
gobernador, Luis González Rodríguez, presentó la renuncia a su cargo hace
más de un mes.
Según fuentes del Ministerio de Gobierno, también se designará a un
militar retirado para que desempeñe el cargo.
También está previsto el cambio del representante del Gobierno en
Sucumbíos, donde actualmente se desempeña en ese cargo Jaime Delgado
Intriago.
También en Imbabura
Dentro de las renovaciones, ese mismo día fue posesionado el nuevo
gobernador de la provincia de Imbabura, Napoleón de la Torre Montero, que
ha estado relacionado con el partido Democracia Popular.
El nuevo funcionario, quien ocupó el mismo cargo durante el mandato del
ex presidente Jamil Mahuad, reemplaza a José Moya, quien fuera jefe
político en ese entonces.
Para el diputado de Imbabura, Antonio Posso, esta designación no tiene
ninguna importancia para la provincia porque desde hace varios años los
gobernadores no cumplen un gran papel.
"Son voceros del régimen cuya misión es la representación en los
organismos estatales como el Consejo de Tránsito", señaló. (Texto tomado
de El Universo)
instituciones en ayudar a los desplazados.
La Cruz Roja Ecuatoriana (CRE) hizo la entrega de alimentos, bidones y
sábanas a los 272 campesinos ecuatorianos que se han desplazado de sus
tierras por temor a venganzas de paramilitares.
La entrega se hizo ayer en los tres albergues improvisados (Jambelí,
Cascales y Foquisa). Un camión facilitado por el Municipio de Cascales
ayudó en la entrega.
El convoy humanitario salió de Lago Agrio a las 08h00 y participaron tres
vehículos, 20 socorristas voluntarios y directivos de la Cruz Roja
nacional y provincial de Sucumbíos.
La Cruz Roja Ecuatoriana ha podido hacer entrega de estas vituallas
gracias al apoyo económico del Comité Internacional de la Cruz Roja
(CICR). La próxima ayuda se dará en quince días, dijo Ricardo Camacho,
director de comunicación de la CRE.
Más ayuda
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los refugiados (Acnur),
la Conferencia Episcopal Ecuatoriana y la iglesia de San Miguel de
Sucumbíos entregaron materiales para la práctica médica a los centros de
salud de la frontera y al hospital de Lago Agrio.
José Samaniego, representante de la Acnur para América Latina, indicó que
el aporte de las tres instituciones es de 38 mil dólares y comprende
materiales como computadoras, colchones, muebles, cilindros de gas,
lámparas y otros objetos.
"Queremos que los refugiados no se conviertan en una carga sino que
aporten al desarrollo del Ecuador", dijo Samaniego.
Las familias indígenas desplazadas de la frontera norte exigen la
inmediata reanudación de clases para más de 125 niños.
El padre Edgar Pinos, coordinador del programa de Atención a los
Refugiados, expresó que el Ministerio de Relaciones Exteriores ha
legalizado la presencia de 750 colombianos, quienes ahora gozan de los
mismos derechos que los ecuatorianos.
El religioso resaltó que aún faltan por legalizarse por los menos unos
dos mil colombianos, quienes huyeron de la violencia que hay en su país,
especialmente en la zona limítrofe.
El padre dio a conocer que la iglesia de la provincia de Francisco de
Orellana ha expresado su voluntad de colaborar con la recepción de
refugiados colombianos, por lo que ya se han informado de las experiencia
de la iglesia de Sucumbíos en este asunto.
Indicó además que están listos los albergues de General Farfán, Puerto El
Carmen, Torres Quichimbo y la casa de las organizaciones en Nueva Loja.
"La Acnur ha gastado unos 450 mil dólares en la construcción y
readecuación de los albergues", señaló.
Mientras la ayuda se intensifica, el movimiento de los desplazados
continúa.
Este es el caso de un matrimonio que, con sus cuatro hijos en hombros,
huyeron de la zona limítrofe con Colombia luego que el pasado sábado
oyeron gran cantidad de disparos.
Según versiones de la CRE basadas en declaraciones de los desplazados, el
tiroteo duró aproximadamente 30 minutos.
La familia, que está alojada en el albergue de Jambelí, encontró a una
vecina con sus dos hijos, quienes también escaparon de la línea
fronteriza. Estos colonos señalaron que eran los últimos en salir y que
ahora sí se asustaron de verdad, se añade en el reporte.
PATRULLAS
Las rondas militares ecuatorianas se incrementaron en la frontera norte
en la zona de Santa Rosa, en donde hace un mes se encontró un laboratorio
clandestino que procesaba coca.
El gobernador de Sucumbíos, Víctor Velazco, lamentó que los militares
traten de "tapar" la información sobre la actuación de grupos armados
extraños en territorio ecuatoriano.
"Los uniformados tampoco responden al pedido de los indígenas
desplazados", dijo el Gobernador de Sucumbíos, Víctor Velazco, quien
reclama que se hagan rondas en las riberas de los ríos San Miguel y
Bermejo.
El TCrnel. Jorge Velasco, de la Brigada de Selva Tungurahua, no quiso
hablar sobre la denuncia del Gobernador.
El prefecto de Sucumbíos, Luis Bermeo, solicitó ayer a la Alta Comisaría
de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) que incluya a los
ecuatorianos en el plan de asistencia para desplazados colombianos que
lleva a cabo en la frontera entre ambos países.
Posta en las Gobernaciones
QUITO.- El régimen inició la renovación de sus representaciones en varias
provincias del país con la posesión el jueves pasado del nuevo gobernador
de Orellana, el coronel en servicio pasivo, Agustín Alejandro Luna.
Este cambio se da cuando los conflictos en la zona fronteriza se han
agravado en los últimos días por las amenazas de los paramilitares
colombianos a las poblaciones ecuatorianas en la frontera.
La designación responde a la decisión de la administración del presidente
Gustavo Noboa de contar con gobernadores con experiencia militar en esta
zona del país, como lo anunció hace un mes el ministro de Gobierno, Juan
Manrique, por los conflictos presentados en la frontera.
El flamante gobernador tendrá las funciones de coordinar con las
autoridades locales el tráfico y tránsito en el río Napo para cumplir los
convenios de integración fronteriza con el Perú, así como la circulación
en el sector de Rocafuerte en Ecuador y Pantoja en el Perú.
El funcionario, dijo el diputado amazónico Estuardo Hidalgo del Frente
Radical Alfarista (FRA), "tiene un nivel de preparación importante,
trabaja en la empresa privada de la provincia y sobre todo, vive y conoce
los requerimientos de la zona".
El próximo cambio será en la provincia de Pastaza, cuyo actual
gobernador, Luis González Rodríguez, presentó la renuncia a su cargo hace
más de un mes.
Según fuentes del Ministerio de Gobierno, también se designará a un
militar retirado para que desempeñe el cargo.
También está previsto el cambio del representante del Gobierno en
Sucumbíos, donde actualmente se desempeña en ese cargo Jaime Delgado
Intriago.
También en Imbabura
Dentro de las renovaciones, ese mismo día fue posesionado el nuevo
gobernador de la provincia de Imbabura, Napoleón de la Torre Montero, que
ha estado relacionado con el partido Democracia Popular.
El nuevo funcionario, quien ocupó el mismo cargo durante el mandato del
ex presidente Jamil Mahuad, reemplaza a José Moya, quien fuera jefe
político en ese entonces.
Para el diputado de Imbabura, Antonio Posso, esta designación no tiene
ninguna importancia para la provincia porque desde hace varios años los
gobernadores no cumplen un gran papel.
"Son voceros del régimen cuya misión es la representación en los
organismos estatales como el Consejo de Tránsito", señaló. (Texto tomado
de El Universo)
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