Quito. 21.01.93. Han pasado cinco años desde que la niña
Estefanía Arias Salvador cursaba sus primeros estudios en el
Colegio Einstein de esta capital. Repentinamente desapareció
del hogar de su madre, María de las Mercedes Salvador, y desde
esa fecha todas las acciones judiciales y legales han sido
infructuosas para que retorne a su hogar.
La niña tendrá ahora cerca de once años, pero se desconoce su
paradero. Su padre es el coronel retirado Anibal Orlando Arias
Chávez, quien la retiró del colegio; y los dos han
desaparecido del país.
El caso Estefanía, como lo ha llamado la prensa nacional, se
ha convertido en una lucha de su atribulada madre por
recuperar a su hija que ha trascendido las fronteras patrias,
ha determinado una serie de acciones legales y policiales en
varios países del mundo, y ha obligado a gobiernos extranjeros
a intervenir, aunque según la justicia ecuatoriana, esa
participación es ilegal.
UN RAPTO FAMILIAR
El último mes del año 1987, a escasos once días de la Navidad,
como una acción de venganza contra una sentencia de divorcio
por la causal de sevicia, el padre llega al colegio de la
menor y a través de engaños convence a las profesoras y retira
a la niña; desde esa fecha, nadie sabe donde está Estefanía.
Han sido años de angustia y desesperación de su madre, María
de las Mercedes, los que han acompañado a esta acción de
búsqueda.
Al momento la Policía ecuatoriana mantiene detenida a una tía
de la menor, Martha Arias Chávez de Haberts, quien es esposa
de un ciudadano belga y tiene doble nacionalidad; se presume
que fue parte del complot para el rapto de Estefanía.
A los días de haber desaparecido de su hogar, la menor, según
informes de la Interpol, es vista en Liege, Bélgica, luego de
que saliera con sus padre, con falsificación de documentos y
pasaportes, vía Bogotá, a bordo del vuelo 515 de Lufthansa.
Estos sesenta meses han sido trágicos, dice la madre, quien ha
intentado todo lo humanamente posible para recuperar a su
hija. En innumerables ocasiones -a través de los jueces y de
los organismos policiales del país, con la cooperación de
organismos de justicia internacional- se ha buscado a
Estefanía sin éxito a lo largo de Europa y Estados Unidos,
llegando a determinar que la menor vivió un tiempo en Liege,
Bélgica, en el domicilio de los esposos Haberts.
Ahora es difícil determinar el lugar donde podría estar la
niña, aunque se presume que estará cerca de su padre, o
internada en algún colegio de Europa o EE.UU.
EN BUSCA DE ESTEFANIA
Largos y tortuosos años de tragedia y de tristeza han rodeado
a la madre y decenas han sido las acciones policiales desde
que el Presidente del Tribunal Tercero de Menores de Pichincha
ordenara la detención y comparecencia del ex coronel Arias.
Ni el ex SIC de Pichincha ni la Interpol Internacional han
podido hacer nada. La patria potestad pertenece a la madre, lo
mismo que la tenencia y cuidado de la niña, según la sentencia
del Juez Décimo Segundo de lo Civil de Pichincha.
De nada sirvió el arraigo interpuesto ante migración del país
[para que impida la salida de Aníbal Orlando Arias con la
niña.
En junio de 1988 la Interpol busca a la niña en Washington,
Estados Unidos, y en Bélgica, sin resultados positivos. En
junio del mismo año el Ministerio de Relaciones Exteriores
recibe en su legación de Bruselas la petición del Juez de
impedir la salida de la niña de ese país y la captura de su
padre el ex coronel Arias; después la petición se extiende a
realizar investigaciones sobre el paradero de Estefanía en
otros países. Dos meses después, el gobierno francés inicia la
búsqueda de la niña en su territorio, sin resultados
positivos.
En agosto de ese mismo año, la Policía ecuatoriana pide a la
Interpol intervenir en la búsqueda.
En octubre la Interpol descubre que la niña estuvo viviendo en
la ciudad belga de Liege con los esposos Michel Haberts y
Martha Arias, pero su rastro se esfuma.
Desde esa fecha se ha perdido contacto; y en los últimos días
la esperanza de recuperar a Estefanía renace cuando es
detenida una tía de la menor, precisamente la persona en cuyo
hogar vivió la niña en los primeros ocho meses desde su salida
de Ecuador. Desde entonces la trama toma otro giro en los
tribunales de justicia, con ingerencia del Embajador de
Bélgica en Ecuador que defiende a la tía de la menor y con la
insistencia de la justicia para que se dé con el paradero de
Estefanía.
CONFIO EN LA JUSTICIA: MARIA MERCEDES SALVADOR
La madre, que ha sufrido largos períodos de depresión, pero no
ha cejado en encontrar y tener en su hogar a Estefanía, dice
que ha sido mucho el tiempo esperado, pero confía en la
justicia.
"No es que me acuerdo de la niña después de cinco años, como
tratan de acusarme los abogados contrarios, mis acciones han
sido desde el 15 de diciembre de 1987".
Para mi ha sido un suplicio, anota, tras narrar que es
perseguida, su vida privada es intervenida, al igual que sus
teléfonos y en la calle por automóviles y personas
desconocidas, en busca de amedrentarla.
"He caminado de puerta en puerta, de las autoridades, de la
justicia. En la Interpol me conocen desde el portero hasta el
Director, por todos estos años en busca de mi hija", dice la
madre.
"He sido atropellada en mis derechos y además humillada y
vilipendiada por sectores interesados en favor de mi ex
esposo; sin embargo, no me van a vencer ni a debilitar jamás,
el amor de madre estará siempre fortaleciéndome en esta lucha,
que no es solo mía sino de todas las madres ecuatorianas que
pasan por esto", agregó.
"No tengo afán de venganza", continúa, al hablar de la
detención de su ex cuñada, "serán los jueces los que
determinen sus faltas, mas no yo. Cuando fui a la cárcel en
busca de hablar con ella, me valí de todo el mundo, imploré,
rogué, le pedí al capellán que la convenciera que me dijera
dónde está mi hija, pero no dice nada".
Termina manifestando que nunca le ha faltado la esperanza de
volver a tener a su hija pese a que se le ha manifestado a la
niña que su madre ha muerto, para que cuando crezca no la
busque, y que no renunciará a su búsqueda.
LA TIA NO PUEDE SER REHEN: JORGE ANDRADE LARA
La tía de Estefanía, Martha Arias, está detenida en esta
capital acusada de plagio. Se afirma que la niña estuvo en su
casa de Bélgica. Su abogado defensor, Jorge Andrade Lara, dice
que la mencionada pariente de la menor no puede ser tomada
como rehén para que a través de ella se pueda conocer el
paradero de la niña.
"Martha Arias es una víctima, está de rehén, es una prenda y
se la tiene en la cárcel hasta que entregue a la menor o avise
dónde está, y eso es ilegal, no existe en el mundo ninguna ley
que determine eso", opina el abogado, quien además afirma que
la Policía de Bélgica ha negado y desvirtuado que en algún
momento, en los últimos cinco años, la niña haya estado allá.
Afirma que el padre no cometió delito alguno, porque la
sentencia de divorcio salió en 1988 y él viajó con la niña en
1987, y eso lo puede hacer cualquier padre.
Agrega, de la misma manera, que defiende a la tía, Martha
Arias, y que ella nada tiene que ver con la situación de su
sobrina; que no hay motiva para esta prisión, la misma que es
completamente ilegal.
MADRE TIENE PATRIA POTESTAD: FISCAL GARCIA
Para el Fiscal de Pichincha, Dr. Wilfrido García, la madre
tiene patria potestad sobre la menor, de acuerdo con la
sentencia.
"Yo juzgo no equivocarme, al decir que tengo la convicción de
que nuestros jueces están procediendo conforme a derecho; de
la misma manera, el caso de la tía está siendo tratado
adecuadamente, porque el propio Municipio de Quito no acoge el
Habeas Corpus", anota.
Luego agrega que el padre, al tener una sentencia por sevicia,
pierde la patria potestad sobre la niña.
El Fiscal manifiesta que tanto la ley cuanto la madre tienen
derecho a saber dónde y en qué condiciones se halla la niña,
de allí que incluso en el caso de que el ex coronel Arias
hubiese tenido la patria potestad de Estefanía, se requería
del permiso de su madre para salir del país.
Finalmente opina que el caso no tiene tinte diplomático o
causa consular, sino que es estrictamente legal, sujeto a las
leyes ecuatorianas.
*FUENTE: Texto tomado de LA OTRA (p.71-73)
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